En lo que llevamos de mes se han realizado en torno a los 4.800 controles de alcohol y drogas en la ciudad. En total, el Ayuntamiento prevé alcanzar los 15.000 controles a final de año.
El delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores Juan Carlos Cabrera ha presentado esta mañana la primera fase del dispositivo semestral de seguridad que se prolongará desde el pasado 1 de diciembre hasta el 1 de Mayo coincidiendo con las dos fiestas señaladas en el calendario sevillano.
Este dispositivo integrado por el área de Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla, Policía Local, Bomberos, Protección Civil y Emergencias Sevilla se ha trazado en cuatro ámbitos. La seguridad de los establecimientos, la movilidad segura y accesible, la convivencia en los barrios y los controles de alcohol y drogas conforman los ámbitos de actuación de este dispositivo de seguridad.
En las dos primeras semanas de diciembre se han registrado en torno a 4.800 controles por alcohol y drogas y se han llevado a cabo mediante dispositivos dinámicos. “El objetivo es aumentar los controles, concienciar de una mayor prevención y así llegar a conseguir la disminución de accidentes de tráfico”, ha apuntado Cabrera, que ha estimado un total de 15.000 controles de cara al final de año. Además ha incidido en la importancia del «suprimir los botellones ilegales que desde el pasado mes de noviembre se están investigando y prohibiendo.»
Siguiendo con este dispositivo semestral de seguridad, han sido 25 los locales inspeccionados hasta la fecha y quedan 50 locales por inspeccionar en este mes. Esta primera fase se ha saldado con dos locales precintados, uno en la calle Puente y Pellón y otro en la calle Alcaicería de la Loza. Los motivos principales que se destacan del cierre del primer local son los medios de extinción inaccesibles, extintores caducados y puertas de emergencias bloqueadas.
Por su parte el local de la calle Alcaicería de la Loza no reunía las condiciones de seguridad necesarias para clientes y empleados y según el informe remitido por el Ayuntamiento, contaba con dificultad para la evacuación de las personas.
En cuanto a movilidad segura y accesible, el Ayuntamiento ha incidido en los obstáculos que se encuentran, en este caso, en el centro de la ciudad. Según los datos que arroja el informe han sido 112 las calles inspeccionadas y 574 los obstáculos encontrados.
Los veladores y los carteles de dos apoyos son los dos obstáculos que mayor inconveniente ponen a la hora de facilitar la accesibilidad de las personas. En este informe se recogen 227 veladores y 124 carteles de dos apoyos que suponen un obstáculo.
Además, se han registrado las calles con mayor dificultad para la accesibilidad, encontrándose entre las calles con más obstáculos las calles, Sierpes, Hernando Colón, Argote de Molina o la Plaza Jesús de la Pasión.
“Este estudio exhaustivo no se ha hecho jamás”, ha declarado Cabrera, que ha referido a que este dispositivo de seguridad en materia de vigilancia de los establecimientos y de accesibilidad se encuentra en su primera fase y que coincide con las zonas con mayor afluencia en Navidad. “Pasadas las fiestas, estas dos actuaciones se llevarán también a los barrios”.
Además, este plan incluye la convivencia en los barrios y tiene como fin “conjugar el derecho al ocio y al descanso”. Los principales ejes trazados se han llevado a cabo teniendo en cuenta las fiestas navideñas. Han realizado un rastreo de las fiestas de fin de año convocadas y han encontrado 24 fiestas programas de las cuales una ha sido suspendida en la barriada de San Jerónimo por tener un aforo de 2.000 personas y haber vendido 4.000 entradas.
Además, a través de canal de Twitter de Emergencias Sevilla, se realizará una campaña de concienciación de fraudes y seguridad en estas fiestas. También se ha tenido en cuenta, según arroja el informe, los puntos de venta de petardos, así como la catalogación del material pirotécnico en función de la edad del cliente. La venta y uso de petardos a los menores de 12 años ha quedado prohibida.
Por su parte, este plan incluye inspecciones en los establecimientos también en los barrios. Hasta la fecha se han realizado 366 inspecciones, lo que ha generado el precinto de 23 locales “fundamentalmente de copas y ocio” y 87 denuncias formuladas.
A la hora de inspeccionar estos locales, el dispositivo de seguridad tiene en cuenta el uso de elementos de autoprotección como extintores en buen estado, el acopio excesivo de material inflamable o la movilidad interior y evacuación complicada en locales como los bazares. Además incluye un análisis de las licencias y una revisión de los elementos eléctricos, garantizando una protección adecuada de los mismos.
En este sentido Cabrera ha reconocido que “el porcentaje de locales precintados teniendo en cuenta el número de establecimientos inspeccionados es mínimo. Esto sucede porque cada vez hay más conciencia”.