Con esta actuación, que ha contado con un presupuesto algo superior a dos millones de euros, se resuelven los problemas de escasez e inadecuación de los espacios destinados a aulas en el edificio original, concebido inicialmente como clínica odontológica para la realización de prácticas por parte de los estudiantes.
La ampliación se ha realizado con un nuevo edificio con identidad propia, compuesto de varios elementos conectados entre sí. Son dos bloques independientes de cuatro y cinco niveles, respectivamente y conectados al edificio original por medio de tres galerías distribuidoras, que además hacen la función de corredor. La composición volumétrica se completa con una tercera y esbelta torre por la que circula un ascensor.
En la planta baja, proyectada inicialmente exenta, se sitúa la Delegación de Alumnos y una sala de usos múltiples, en las tres primeras plantas se han ubicado las seis aulas nuevas y los corredores con el edificio antiguo, dejando el Salón de Grados en la cuarta.