Pasadas las 14:00 horas ya se formaban las primeras colas en el metropolitano hispalense, donde muchos ciudadanos trataban de conseguir tickets o recargar sus tarjetas de viaje. A veinte minutos para las dos de la tarde, Manuel Chaves daba la orden para empezar a funcionar tras un acto largo  con conexiones vía satélite.

Galería de imágenes de la inauguración del Metro

Christopher Rivas/Agencias. Casi 40.000 personas pasaron ayer por la línea 1, que los acogió con alguna que otra dificultad por la enorme afluencia de público que obligó a cerrar durante algunos minutos las estaciones del metropolitano hispalense.

Algunas averías en las máquinas expendedoras y en las compuertas de acceso a los andenes, dificultaron más la ya complicada jornada que venía precedida por la ratuidad del servicio, lo que llevó a muchos de los usuarios a acercarse a las estaciones de un metro, que ayer no era un medio de transporte, sino un tren turístico. Los ciudadanos lo usaron para pasearse, y eso se notó en la enorme acumulación de personas.

A las 14 unidades que estuvieron funcionando durante la jornada, tuvo que unirse una más para reforzar el servicio, aunque en ningún caso se fletaron trenes de doble composición con mayor capacidad, sino combinaciones cortas, con un solo tren en cada una, en lugar de dos. Esto supone que, el metropolitano funcionó a medio gas, ya que la mitad de la superficie de los andenes, no se estaba usando.

Entre las incidencias más destacas estuvo la detención de uno de los trenes por la pérdida de un niño que montó en uno de los vagones, mientras que sus padres quedaron en el anden de la estación de Nervión. Finalmente el pequeño apareció en la estación de 1º de Mayo, por lo que el incidente quedó solo en anécdota.

Fueron 30.000 las personas que, hasta las 20:00 horas de la tarde, habían accedido ya al suburbano, lo que hacía esperar que se alcanzaran las 40.000 antes de cerrar la jornada, alrededor de las 23:00 horas.

Las primeras horas estuvieron marcadas por las colas, no tanto en los andenes, sino en las máquinas expendedoras de billetes y de recarga de tarjetas, donde los viajeros del metro, se afanaban por conseguir sus títulos de viaje para poder acceder a los andenes y viajar en los trenes.

La orientación no acompañaba ayer a todos. Los indicadores luminosos no funcionaron todos correctamente, y sumado a la novedad y al desconcierto inicial, hizo que el llegar a la estación de destino fuese más complicado de lo normal.

Tampoco ayuda a orientarse el monocolor ‘verde junta’ que acapara el protagonismo en todas las estaciones de la línea 1, siendo este aparente detalle, un inconveniente a la hora de aclararse en destinos y sentidos.

Pero nada de esto impidió que los trenes viajasen repletos, que las colas fueran en aumento durante todo el día y de que casi 40.000 personas según las estimaciones de Ferrocarriles Andaluces, pasaron ayer por la línea 1, la primera del Metro de Sevilla.

Licenciado en Periodismo y Máster en Sociedad, Administración y Política, puso en marcha el 'Proyecto Deguadaíra', germen de Sevilla Actualidad. Ha pasado por El Correo de Andalucía, Radio Sevilla-Cadena...