El barrio de Santa Justa se encuentra en pie de guerra a causa de los atascos diarios que generan los autobuses que transportan turistas hacia El Palacio Andaluz, un establecimiento de espectáculos de cante y baile flamenco en tablao dirigido al turismo extranjero.
De lunes a sábado, José Antonio, vecino del barrio de Santa Justa, sufre continuos atascos desde hace un año cada vez que tiene que entrar o salir de su garaje. El motivo es la aglomeración de autobuses que transportan turistas hacia un tablao flamenco ubicado en María Auxiliadora. Según cuenta este vecino a Sevilla Actualidad, existe un espacio reservado a la carga y descarga de los pasajeros, sin embargo, «sólo cabe un vehículo como mucho, pero es habitual ver a más de diez autobuses uno detrás del otro».
El resultado es un tapón en el cruce de la calle Salesianos con la calle Arroyo, arterias pertenecientes al barrio de Santa Justa, hecho que impide el paso de cualquier vehículo. «Normalmente los atascos se producen en dos tandas: la primera va desde las 19.30 horas hasta las 21.00 horas, y la segunda de 22.30 horas hasta las 23.00 horas», narra José Antonio.
La calle mas afectada es Salesianos, la cual colapsan totalmente llegando a tener que esperar de 20 a 30 minutos para salir de la vía. Un destino alternativo sería que los autobuses descargaran a sus pasajeros en la propia avenida, la cual cuenta con cuatro carriles, «sólo tendrían que cruzar un paso de cebra» asevera el joven.
«Antes de verano la Policía intentaba regularizar la situación tanto en la entrada de la Calle Salesianos como a la salida pero dejaban pasar a todos los autobuses, por lo que estábamos en las mismas o peor ya que desviaban a los coches particulares a otras calles. Así que si ibas para el gimnasio, el colegio mayor, o eras de los vecinos con garaje en esa calle te tenias que fastidiar hasta que dejaran entrar en ella».
Un dispositivo especial para regular el tráfico
El Gimnasio Atlas y el Colegio Mayor San Juan Bosco han sido las primeras instituciones privadas en emitir quejas a la Policía Local, puesto que estos atascos dificultan la entrada y salida a sus instalaciones. A nivel vecinal, José Antonio desconoce si se ha interpuesto alguna denuncia conjunta, pero que no le «extrañaría nada porque cada vez hay más vecinos que no aguantan esta situación a diario».
Desde este medio de comunicación nos hemos puesto en contacto con fuentes municipales para conocer si desde el Ayuntamiento de Sevilla se está trabajando al respecto. El Área de Movilidad asegura haber mantenido ya diversas reuniones con la empresa que genera los problemas de saturación de las vías circundantes, así como con la Confederación de Empresarios de Sevilla. «Asimismo, se ha mantenido durante varios meses un dispositivo especial en la zona a fin de evitar el estacionamiento de hasta 35 autobuses en diversas zonas aledañas que se ha saldado con numerosas sanciones hasta la fecha», explican fuentes municipales.
Para el Ayuntamiento, el problema surge principalmente debido a la inexistente planificación por parte de este negocio de cara a regular la subida y bajada de viajeros que acuden a su local, para lo cual el Área de Movilidad, en coordinación con la Policía Local, ha planteado en diversas ocasiones la necesidad de que los responsables de esta actividad económica se doten de un jefe de tráfico que permita asignar turnos de llegada de los autobuses de dos en dos, acordes al espacio reservado para tal fin, en función de la salida de los turistas. «Durante varios meses se ha recibido la negativa por parte de la empresa, hasta que antes del verano aceptaron dicha posibilidad», concluyen dichas fuentes.
Actualmente se está cerrando con la misma el lugar de espera y punto de recogida de estos autobuses, para lo cual hay planteada una reunión la semana próxima, junto con los representantes de la Confederación de Empresarios, a fin de acordar una solución satisfactoria para los vecinos y la propia empresa y que no perjudique a la fluidez y seguridad del tráfico y de los peatones.
«En ningún momento se trata de poner trabas al negocio y, de hecho, este establecimiento es importante como atractivo turístico. Sin embargo, deben solucionarse ya los problemas y molestias que ocasionan a los vecinos y al tráfico en general en una vía, María Auxiliadora, que es una arteria principal de la circulación en la ciudad», sentencia el gobierno muncipal.