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La segunda modificación del proyecto Metropol-Parasol de la plaza de la Encarnación ha sido resuelta como “desfavorable” por la comisión permanente del Consejo Consultivo. Aunque la decisión de este órgano no es vinculante, el proceso de trámites y construcción, se ralentiza aún más.

 


Sevilla Actualidad/Agencias. El dictamen desfavorable aprobado el miércoles por unanimidad en dicha Comisión Permanente del Consejo Consultivo, fue remitido ayer al Ayuntamiento de Sevilla. En el documento aparecen consideraciones –justificadas— a la modificación del proyecto, como la instalación de un nuevo centro de transformación del suministro eléctrico y de un sistema de protección contra incendios en la estructura de los parasoles.

En concreto, el Consejo señala que el resto de modificaciones «o no encajan en los presupuestos legales o carecen de motivación», como es el caso de la propuesta de cambio del pavimento, ante lo que considera que no se explica bien la justificación del mismo, ya que si éste responde al proceso de peatonalización del centro no se entiende la modificación del material.

De igual modo, rechaza la nueva reordenación de los puestos del mercado de abastos, que el Ayuntamiento justifica en que responde a peticiones de los propios comerciantes. El Consejo argumenta al respecto que «no está justificado por ningún cambio normativo» y que estos nuevos criterios «se podrían haber tenido en cuenta al principio del proyecto».

En cuanto al principal escollo del modificado, que implica la mayor desviación presupuestaria –es decir, aumento presupuestario– la estructura de madera, el Consejo determina que se trata de «una modificación sustancial con respecto a la solución prevista en los proyectos básicos y de ejecución» y señala que «difícilmente» se pueden «incoar consecuencias de causas imprevistas».

Asimismo, el documento aclara que no puede utilizarse un modificado para «ocultar errores y falta de previsión en los proyectos originales», ante lo que exige «más rigor» en la elaboración de los proyectos iniciales, que «deben contener todas las previsiones necesarias».

De esta forma, el dictamen negativo a la totalidad del aumento presupuestario contenido en el segundo modificado propuesto por la Gerencia de Urbanismo, será valorado por el Ayuntamiento para ver si es más caro parar la obra o seguir adelante.

Según un comunicado enviado por la propia Gerencia de Urbanismo y teniendo en cuenta que el carácter no es vinculante, el Ayuntamiento apuesta por seguir con la ejecución de las obras y la modificación del proyecto por “interés público”.

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