Rocío, de 14 años y residente en Camas, ha ratificado que su novio le confesó el crimen pocas horas después. Tras dos horas prestando declaración, la Fiscalía de Menores no ha ejercido medida sobre ella, ya que sólo es una testigo en el caso. Antonio del Castillo, padre de la menor fallecido, ha explicado que confía en que la Justicia “tome medidas contra los encubridores”.
Sevilla Actualidad. La novia de Miguel Carcaño, autor confeso del crimen de Marta del Castillo, ratificó ayer ante el juez que su novio le contó lo que había hecho pocas horas después de matar a Marta.
Rocío, la menor de 14 años de edad y residente en la localidad sevillana de Camas, ha estado alrededor de dos horas prestando declaración como testigo en el juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla. Rocío ha reconocido que Miguel le confesó que había quedado con Marta, la había golpeado en la cabeza y se había deshecho del cuerpo con la ayuda del menor de 15 años y de Samuel B.P.
La menor llegó a la sede judicial con una familiar y acompañada de su abogada, e inició su declaración alrededor de las 11 de mañana, finalizando sobre las 13:00 horas ante una gran cantidad de medios de comunicación que esperaban en los alrededores de los juzgados.
En lo que respecta a las medidas que se tomarán sobre la menor, la Fiscalía de Menores ha decidido no atribuirse ningún castigo por el momento, ya que, Rocío tan sólo es una testigo en el caso.
Aunque la menor ha estado durante un mes y medio negando que supiera algo del crimen, y pese a recalcarlo incluso en programas de televisión, ha terminado confesando que la noche del 24 de enero, Miguel llegó a casa donde vivía con ella y su familia en torno a las 22.50 horas.
Rocío ahora ha explicado que vio a su novio nervioso y con una mancha de sangre en el pantalón que pretendía ocultar. Tras preguntarle, Miguel intentó justificarse indicando que había tenido un accidente con la moto, pero tras ello pidió perdón a su novia tras romper a llorar, a lo que ella dejó de preguntarle y comenzó a preparar la cena.
La menor descubrió al día siguiente que la ventana de su habitación, que ella explicó que había dejado cerrada, se encontraba abierta, lo que determinaba que su novio no le había dicho la verdad y pudo haber salido de noche a deshacerse del cuerpo de Marta, trastornado así la versión oficial de Miguel al expresar que lo había arrojado al río sobre las 22:30 horas.
Sin embargo, Rocío ha explicado que Miguel siempre le negó que su hermanastro Javier D., participara en la agresión, aunque si le admitió que en ese momento se encontraba en la vivienda de León XIII.
La abuela de Rocío, Soledad Gómez, también prestó declaración el pasado lunes, ya que podría haber cometido un delito de encubrimiento al ocultar pruebas. Gómez había lavado la ropa que Miguel llevaba la noche del crimen, por lo que se tendrá que determinar ahora si esta mujer actuó de forma consciente o no sabía nada de los hechos mientras acababa con una prueba.
Antonio del Castillo: “que se tomen medidas contra los encubridores”
Ante las novedades en el caso, el padre de la menor fallecida, Antonio del Castillo, explicó que no se había sorprendido de que la novia de Miguel conociera los hechos, ya que desde el principio tenía claro que la menor sabría lo ocurrido.
Así, Del Castillo ha expresado que confía que la Justicia “tome medidas contra todos los encubridores” del crimen de su hija. Además sostiene que le “parecía sospechoso que nadie supiera nada”, afirmando que “quien lo sepa y no lo haya dicho debe responder ante la ley”.
El padre de Marta ha añadido que la investigación de la muerte de su hija se ha convertido en un “cachondeo”, ya que “los implicados se están riendo de la Policía, del juez y de todos los ciudadanos”, por lo que ha expuesto que esta menor debería estar en encerrada como el otro menor implicado en el caso.