Debido a las últimas lluvias, Autoridad Portuaria de Sevilla esperará a que baje el cauce del río Guadalquivir para evaluar los daños ocasionados por los temporales y poder, así, poner en funcionamiento la nueva esclusa. Las previsiones iniciales apuntaban al primer semestre del año para su apertura.
Sevilla Actualidad. Habrá que esperar a que el cauce del río Guadalquivir baje. Habrá que esperar, pues, hasta el último trimestre del año. Todo, para poner en funcionamiento la nueva esclusa.
Así lo ha adelantado Autoridad Portuaria de Sevilla, que señaló a las últimas lluvias como las responsables del retraso en su puesta en servicio. De esta forma, se optará por esperar para poder evaluar los posibles daños registrados en la zona de cablestacas del antepuerto.
En este sentido, será necesario un periodo de unas dos semanas, aproximadamente, para valorar si hay perjuicios de consideración o no y poder establecer un calendario definitivo, siendo así que las previsiones iniciales apuntan a que en el primer semestre pudieran quedar concluidas algunas de las intervenciones que se llevan a cabo en esta estructura.
Anteriormente, la Autoridad Portuaria sevillana aludió al mes de abril, «en el peor de los supuestos», para que la esclusa, que se encuentra en fase de montaje de equipos y probaturas, estuviera plenamente operativa y con todos sus accesos correspondientes.
Según ha avanzado el presidente del Puerto de Sevilla, Manuel Fernández, el nuevo equipamiento supondrá un acceso con una capacidad que pasa de manga 24,5 a 40, lo que implica que determinada tipología de barco que por manga no podían entrar en Sevilla ahora sí van a poder hacerlo, informa Europa Press. Ello, además, favorece indirectamente la producción naval de astilleros, ya que «determinadas pedidos no podían atenderse por las características de la esclusa, muy obsoleta -data de 1949- y con un diseño inadecuado».