La Policía Local de Sevilla realizó este sábado una treintena de intervenciones, en la que se intervinieron múltiples alimentos en mal estado, contra la venta ambulante ilegal en las inmediaciones del Estadio Olímpico de la Isla de La Cartuja durante la previa a la final de la Copa del Rey, que enfrentó al Real Madrid y al Osasuna, siendo los ganadores los primeros.

Los agentes destacan especialmente la localización e identificación de cuatro personas procedentes de Madrid, que se habían desplazado en tres vehículos cargados de mercancía, para su venta en este evento.

Según informa Emergencias Sevilla a través de Twitter, los alimentos intervenidos durante la previa de la final de la Copa del Rey, muchos de ellos caducados desde 2022, habían incumplido la cadena de frío y fueron destruidos como residuos por Lipasam. Uno de los vehículos quedó inmovilizado en los almacenes municipales y se incoaron diferentes expedientes sancionadores.

¿Qué ocurre al romper la cadena de frío?

El frío es un elemento clave en la seguridad alimentaria. Además de retrasar la degradación de los alimentos y de sus propiedades sensoriales (olor, sabor y gusto), ayuda a ralentizar el crecimiento de los microorganismos responsables de intoxicaciones asociadas a su consumo favoreciendo la conservación de los alimentos.

Si los alimentos congelados se descongelan, aunque sea parcialmente o durante unos minutos, la actividad microbiana se reanuda. Si volvemos a reducir la temperatura, la actividad volverá a parar, pero la población de microorganismos será mucho mayor que antes del aumento de temperatura y las probabilidades de que los productos se deterioren o de que se produzca una toxiinfección alimentaria son mayores. Algunas consecuencias son:

  • Se altera la calidad de los alimentos: malos olores, pérdida nutricional o aparición de bacterias.
  • Se reduce el tiempo de conservación.
  • Existe mayor riesgo de intoxicaciones producidas por el consumo de alimentos en mal estado.