La primavera llegó a Sevilla, y con ella, las altas temperaturas, que alcanzarán en la semana de Feria hasta los 36 grados centígrados. Es común en la capital hispalense que, a partir de estas fechas de dicho aumento de temperatura, y por la humedad que conlleva su proximidad al río Guadalquivir, vuelvan a hacer su aparición hormigas, avispas, cucarachas, mosquitos… y pulgones.

De hecho, desde el pasado martes, todos los vecinos de la capital han presenciado una auténtica plaga de estos últimos bichitos que, aunque minúsculos, se cuentan por miles, vuelan en grupos enormes e inundan el aire de las calles de Sevilla. No han sido pocos quienes han dejado constancia de esta plaga de pulgones, ya sea desde sus redes sociales o grupos de WhatsApp. Es el caso de la fotógrafa M. Carmen Bravo, autora del siguiente vídeo.

¿Qué son los pulgones?

En un principio se comentó que eran mosquitos, pues también este tipo de insecto se manifiesta en forma de plaga, y es común en esta época, pero finalmente se ha reconocido que se trata de pulgones. La pregunta es obligada, puesto que no se trata de un insecto tan conocido.

Los pulgones, también llamados áfidos, son pequeños insectos chupadores de plantas que se alimentan de la savia de diversas especies de plantas. Se pueden encontrar en una amplia variedad de plantas, incluyendo árboles, arbustos, hortalizas y plantas ornamentales.

Los pulgones tienen cuerpos blandos y redondeados, con patas delgadas y antenas cortas. Suelen ser de color verde, marrón o negro, aunque también pueden ser de otros colores. Los pulgones pueden reproducirse rápidamente, lo que los convierte en una plaga común en jardines y cultivos.

Además de chupar la savia de las plantas, los pulgones también pueden transmitir enfermedades y virus de una planta a otra. También pueden excretar una sustancia pegajosa llamada «melaza», que puede atraer a otros insectos y hongos no deseados.