Agentes de la Policía Nacional han detenido, a principios del marzo en Sevilla, a cuatro individuos por su presunta implicación en unas amenazas graves con arma de fuego y lesiones al trabajador de un establecimiento.

Los detenidos entraron en la tienda y agredieron violentamente al dependiente de la misma, llegando incluso a encañonarlo con un arma de fuego.

Se imputaron a los detenidos los delitos de homicidio en grado de tentativa, lesiones, amenazas graves, tenencia ilícita de armas, tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico. Los detenidos ya han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.

Uno de los individuos consiguió desviar el disparo de su compañero

La investigación de los hechos se inició a raíz de la denuncia interpuesta por la víctima el pasado 29 de diciembre, la cual manifestó que un individuo había entrado en el comercio y que tras llamarle la atención por colarse en la fila para abonar los productos, este le amenazó verbalmente y se marchó del lugar.

Posteriormente, este sujeto regresó junto con dos personas más al establecimiento y tras insultar nuevamente al trabajador, comenzaron a agredirle violentamente. Fue entonces cuando uno de los sujetos sacó del bolso un revolver con el que encañonó a la víctima y disparó.

Afortunadamente, otro de los implicados al ver que su compañero iba a hacer uso del arma golpeó en el brazo del autor del disparo y consiguió desviar la trayectoria del mismo, impactando el proyectil en el techo del establecimiento, tras lo que abandonaron el local a bordo de diferentes vehículos.

Tras las pesquisas realizadas por los agentes especializados en este tipo de delitos, se logró la plena identificación de los tres autores y la localización de las viviendas donde se encontraban, por lo que se solicitaron a la autoridad judicial los correspondientes mandamientos de entrada y registro para dos domicilios.

Se detuvo a los tres autores y a un cuarto sujeto implicado

Finalmente se logró detener a los tres autores y a un cuarto sujeto con el que compartían vivienda por encontrar en el registro de los domicilios una escopeta con dos cañones y 216 plantas de marihuana. Además, se comprobó que una de las moradas, en las que se efectuó el registro domiciliario, tenía conectado el suministro eléctrico a la red de forma fraudulenta, por lo que se procedió a la imputación de un delito de defraudación de fluido eléctrico.