La capital ha contribuido, asegura Medio Ambiente, a frenar el cambio climático, convirtiéndose en la única gran ciudad española que emite actualmente menos gases contaminantes que hace diez años. Se tiene una confianza en lograr un acuerdo en la Cumbre del Clima de Copenhague para evitar que el calentamiento global tenga graves consecuencias.

Sevilla Actualidad. Gracias a la política de peatonalización y de fomento del transporte público, la reducción de emisiones de gases contaminantes a la atmósfera en Sevilla en los últimos cuatro años, ha disminuido en un 23% en cuanto al dióxido de azufre y el dióxido de nitrógeno y en un 25% en relación al dióxido de carbono. Así, la delegada de Medio Ambiente, Encarnación Martínez, ha asegurado que “la capital hispalense es la única ciudad española de más de 600.000 habitantes que hoy emite a la atmósfera menos gases que hace 10 años”.

El Ayuntamiento está trabajando para aumentar la superficie de los captadores naturales, los llamados sumideros de CO2. Para ello se están llevando cabo acciones como el Plan Hidrológico, Forestal y de Protección de Cauces, con una inversión de más de 200 millones de euros, donde, a través de 14 proyectos se están recuperando las riberas del Guadalquivir y sus cauces.

Entre los principales proyectos que Sevilla lleva a cabo y que repercuten positivamente en la sostenibilidad de la ciudad se encuentra la implantación de una red de microbuses eléctricos que unen la ronda histórica con el centro; el cambio de los autobuses de la ciudad para que se muevan con combustibles más ecológicos, como el gas natural comprimido o el biodiésel; el Metrocentro como transporte limpio; la construcción de 140 kilómetros de carril bici, o la creación de la línea 1 del Metro de Sevilla.

Para el futuro se plantea la ampliación de la peatonalización para que se comuniquen las zonas peatonales del centro con las orillas del río y las zonas verdes de la ciudad; el crecimiento de estas zonas verdes; la aplicación de bonificaciones a las empresas sostenibles; el desarrollo del Plan Director de Ahorro Energético en el alumbrado público de Sevilla o el compromiso en la adhesión al Pacto de Alcaldes, que supondrá la reducción de más del 20% de CO2 antes de 2020.

La UE ya ha decidido una reducción mínima del 20% en 2020, en relación con los niveles de emisiones de 1990. Ese porcentaje se elevaría al 30% si otros países asumieran un compromiso equivalente.

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