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Las medidas aprobadas por Real Decreto para el ahorro energético entrarán en vigor este miércoles 10 de agosto a las 00:00 horas. A partir de entonces, establecimientos públicos y privados deberán acatar tales directrices con el objetivo de reducir en un 7% la dependencia del gas ruso de cara a la generación energía.
Sevilla, como cualquier otro punto de la geografía española, tendrá que hacerlo, pero sus monumentos permanecerán iluminados más allá de las 22:00 horas. En el caso de dicha iluminación, el Decreto-Ley no limita a los ayuntamientos el encendido de sus símbolos más emblemáticos, pero, como gesto de solidaridad, Valencia, por ejemplo, ya ha anunciado que apagará sus luces a las 22:00, como lo deberán hacer los escaparates de los negocios de la ciudad.
Entrada en vigor del Decreto-Ley para el ahorro energético
A partir del 10 de agosto el Real Decreto que contiene el paquete de directrices para el ahorro energético entrará en vigor. Según éste, en verano, la refrigeración y climatización de los establecimientos públicos y privados no podrán superar los 27 grados y en invierno, el límite superior se encontrará en 19 grados. Todo ello, siempre y cuando se ajusten dichos preceptos al cuidado de la salud y bienestar de las personas.
En cuanto a los negocios y establecimientos, a partir del 30 de septiembre, estos deberán contar con puertas de acceso automáticas para asegurar que estos espacios siempre permanecerán cerrados, excepto los momentos de tránsito. Se considera que, hasta el momento, se ha desperdiciado mucha energía en la existencia de aperturas sine die, independientemente de la energía despilfarrada.
Otra medida que ha sido muy polémica afecta a la iluminación de los escaparates. Desde las 00:00 horas de este 10 de agosto deberán apagarse a las 22:00 horas. De momento, según lo que se recoge en el BOE, estas medidas permanecerán hasta el 1 de noviembre de 2023.
Una meta apuntada por la UE
Para aumentar la seguridad del suministro energético de la UE, el Consejo adoptó el pasado 5 de agosto un Reglamento sobre una reducción voluntaria de la demanda de gas natural este invierno en un 15%. El Reglamento prevé la posibilidad de que el Consejo active una «alerta de la Unión» sobre la seguridad del suministro, en cuyo caso la reducción de la demanda de gas pasaría a ser obligatoria.
El objetivo de la reducción de la demanda de gas es ahorrar energía este invierno a fin de prepararse ante posibles perturbaciones del suministro de gas procedente de Rusia, que utiliza sistemáticamente el suministro de energía como arma.
Los Estados miembros han acordado reducir su demanda de gas en un 15% con respecto a su consumo medio correspondiente a los últimos cinco años, entre el 1 de agosto de 2022 y el 31 de marzo de 2023, adoptando medidas de su propia elección.
En el caso de España, de momento, estas medidas aspiran a la reducción de un 7% de la energía. Medidas que estarán vigentes hasta noviembre de 2023.