Este martes ha tenido lugar el acto de clausura de Educar en Igualdad, un programa que cada año se pone en marcha desde el Servicio de la Mujer y que este curso 2021/22 ha superado ampliamente la participación de ediciones anteriores con un total de 9800 estudiantes de distintos niveles educativos y padres y madres a través de escuelas de familias.

Así, son 74 centros de Sevilla de todos los niveles educativos los que han participado en este programa —escuelas de Educación Infantil, colegios públicos de Infantil y Primaria, centros privados y concertados, Institutos de Secundaria o Centros de Personas Adultas— y 16 escuelas de familia. En total  se han impartido 425 talleres formativos sobre Coeducación y Relaciones Igualitarias y Saludables.

En marcha desde 2008

El programa Educar en Igualdad, que el Ayuntamiento tiene en marcha desde 2008 —exceptuando el paréntesis de la pandemia— ha alcanzado ya a 70.000 personas, si bien la de 2021/22 ha sido la edición más amplia con mayor número de participantes y de talleres. Casi 1000 participantes más que en la última edición de 2019 —la anterior a la pandemia— y el doble de la cifra que participaba en el año 2016.

Este programa es coordinado por la Unidad contra la Violencia de Género del Servicio de la Mujer y se desarrolla a través de la impartición de talleres formativos de coeducación y de relaciones igualitarias y saludables, que están dirigidos, especialmente, al alumnado de los distintos niveles educativos (Infantil, Primaria, Secundaria y Personas Adultas) y a las familias, así como la realización de actividades de coordinación, información y sensibilización al profesorado, de los centros educativos.

El objetivo fundamental del programa es avanzar en la consecución de la igualdad real y efectiva, así como en la erradicación y prevención de cualquier manifestación de la violencia de género en la ciudad de Sevilla y especialmente entre su población más joven. También pretende sensibilizar sobre la necesidad de una escuela coeducativa que favorezca las relaciones igualitarias y el desarrollo personal, libre de estereotipos y prejuicios sexistas.

Para ello, es imprescindible la participación activa de la comunidad educativa (profesorado, alumnado y familias) en la promoción de la igualdad y el establecimiento de relaciones igualitarias y saludables, como medio para la  prevención de cualquier manifestación de violencia de género dentro de las aulas.