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La Policía Nacional interceptó el pasado domingo a 59 ultras del Sevilla que viajaron a Madrid con motivo del enfrentamiento entre el club de Nervión y el Atlético de Madrid. Según ha informado la Jefatura Superior de Madrid, a estos ultras se les intervinieron palos, cascos y petardos que contenían rocas incrustadas.
La actuación de la Policía evitó una batalla campal entre los ultras del Sevilla, los Biris, de ideología de ultraizquierda, con Frente Atléticos, grupo ultra del equipo colchonero que defienda tesis de ultraderecha. Los hechos ocurrieron horas antes de que comenzara el encuentro, en torno a las 15:00 horas, cuando los agentes localizaron a los Biris por una zona de Las Rozas, todos vestidos de color negro.
Como método de prevención de la violencia en el deporte, se les practicó un registro que dio como resultado la incautación de esos materiales que iban a ser utilizados en una pelea multitudinaria.