El sindicato ha informado que los casos de agresiones tanto a estos profesionales como a otros pacientes ingresados en el propio servicio se vienen repitiendo con una frecuencia excesiva.
La Sección Sindical de CCOO ha denunciado la situación de inseguridad en la que se encuentra el personal que desarrolla su actividad laboral en la Unidad de Psiquiatría del hospital de San Lázaro desde hace un periodo dilatado de tiempo.
Según ha informado el sindicato, el pasado día 1 de marzo se produjo una grave agresión, en la que sufrieron lesiones físicas cinco profesionales, en muchos de los casos de especial gravedad. Y es que un enfermero sufrió un traumatismo craneal con perdida de la conciencia, acompañado de una fractura de muñeca; otro profesional padeció una fisura costal y el resto importantes contusiones y cuadros de dolor de diferente índole.
El 25 los trabajadores de esta Unidad sufrieron un nuevo caso de agresión en donde las lesiones sufridas por uno de los trabajadores son también de consideración.
«CCOO lleva meses denunciando esta situación ante la dirección del Hospital Macarena -al estar adscrito al mismo- y si bien es cierto que desde la dirección de ese Hospital se han tomado una serie de medidas para intentar paliar esta situación, lo cierto es que a la luz de los acontecimientos están siendo insuficientes, dado que son continuos los percances que sufren los que allí trabajan e incluso se pone en peligro la integridad de otros pacientes allí ingresados en el caso de aparecer una conducta agresiva por parte de alguno de ellos”, aseguran desde el Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Sevilla.
El Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Sevilla asegura, además, que “esta Unidad de Psiquiatría se encuentra atrapada en un laberinto burocrático, ya que se trata de un dispositivo que pertenece al Hospital Virgen del Rocío, a pesar de encontrarse ubicado en el área del Hospital Macarena, lo que, a nuestro entender, no hace otra cosa más que dificultar las soluciones que se puedan dar a este importante problema, mucho menos en un caso como del que hablamos en donde se atienden a los ingresos de carácter urgente, incluidos los de carácter involuntario sin que existan los medios materiales y humanos para dar respuesta a este tipo de necesidades”.