Hoy se han instalado dos de las icónicas luminarias y que quedarán integradas en el nuevo parque junto a la Torre Sevilla.
Las icónicas farolas -y a su vez veletas- de la Exposición Universal de 1992 han vuelto hoy a lucir como nuevas en la Isla de la Cartuja. Son sólo dos, y se han ubicado en lo que será el nuevo parque Magallanes, entre el río y la Torre Sevilla. Es precisamente en el marco del proyecto que el arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra ha diseñado para esta zona y el nuevo CaixaForum, en el que se incluye la recuperación de dos de estas estructuras de gran altura, y que han sido restauradas para que vuelvan a lucir como nuevas.
Estos elementos, con su particular veleta, forman parte del imaginario colectivo de elementos urbanos de la Expo’92, y desde hoy vuelven a lucir casi como entonces, ya que el característico poste azul sobre el que se ubicaban ahora ha cambiado el color por el gris, lo que no impide volver a recordar como hace 24 años, unas veletas que sirvieron para identificar al recinto expositivo de la Isla de la Cartuja.
Las características luminarias estaban ubicadas en distintos lugares del recinto, especialmente en los antiguos aparcamientos de la muestra. Fueron diseñados por el londinense Perry King y el sevillano Santiago Miranda, inspirándose en las alas de Curro, la inmortal mascota de la Expo’92.
La recuperación de estas dos luminarias se logró gracias al rechazo mostrado por la Asociación Legado Expo Sevilla tras conocer el proyecto para la recuperación de la zona. Finalmente y tras asumir el Ayuntamiento de Sevilla parte de sus peticiones, se mantendrán, además de estas luminarias, la escultura de Jesús Soto ‘Media esfera azul y verde’, que daba la bienvenida a los visitantes de la muestra por la zona sur de la Exposición.
@expo92 parte del momento del izado de la veleta norte. pic.twitter.com/EI0bffwUjA
— Alberto (@AlberRCruz) 27 de julio de 2016