El nuevo museo bajo el mercado de Triana, encuadrado en el Plan Turístico de Sevilla, es una oferta nueva y singular que aporta a los ciudadanos un atractivo histórico, cultural e incluso emocional, permitiendo al visitante descubrir un espacio recuperado de nuestra historia y de interés general.
Sevilla Actualidad. El Museo del Castillo de San Jorge es hoy una realidad a disposición de los ciudadanos, tras su inauguración a la que asistieron el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, y el consejero de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta, Luciano Alonso, acompañados por Valentín Trillo, arquitecto, otras entidades y vecinos de Triana.
El Museo, que cuenta con salas y espacios expositivos interactivos, tiene una inversión de 2´5 millones de euros, financiados por el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía, fruto del trabajo coordinado de las delegaciones de Urbanismo, Salud y Consumo, y el Consorcio de Turismo y la consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Administración Autonómica.
En su origen, el proceso de rehabilitación de este Castillo comenzó con un concurso de ideas realizado por la delegación de Presidencia que fue adjudicado a la empresa Joaquín Pérez Diez S.L.
El 12 de mayo de 2008 se firmó el convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Sevilla a través de su delegación de Salud y Consumo, para la Gestión del centro de interpretación de los restos arqueológicos del castillo San Jorge.
El proyecto de obra fue aprobado por la Comisión de Patrimonio de la delegación provincial de la Junta de Andalucía y la ejecución de la obra definitiva se inició en septiembre de 2008, con una plazo de ejecución de 12 meses, y realizándose en julio de 2009 un modificado sobre el proyecto de obras.
Distribución del centro. En la parte superior, se encuentra la sala sensorial en la que se descubre la fuerza de las imágenes y el visitante se sentirá partícipe del juicio de valores, el abuso de poder o el tratamiento a las víctimas.
En la parte inferior, se encuentran los restos arqueológicos del Castillo San Jorge que se podrán ver mediante visita guiada o libre, contemplar las ruinas, leer la historia del edificio y ver el audiovisual sobre un proceso inquisitorial ficticio.
La finalidad es interpelar al visitante, ponerlo en situación e incluso que de alguna forma se identifique como una víctima potencial.
Los restos arqueológicos. El Castillo fue, en origen, una construcción almohade iniciada en 1171 como defensa del puente que garantizaba la comunicación entre Sevilla y el Aljarafe, formado por una muralla, un foso y una barbacana.
La construcción, que contenía diez torres, tras la reconquista de la ciudad por parte de Fernando III fue entregada a los Caballeros de la Orden de San Jorge de quienes toma su nombre.
Era un recinto amplio de cárceles secretas y en la parte baja de la torre de San Jerónimo, la cámara de tormento. En La barbacana se explica mediante atriles la evolución histórica del edificio. El terreno acabaría convirtiéndose en mercado de abastos al aire libre.
Contenidos
La sala sensorial ofrece imágenes y mensajes que sitúan al visitante ante procesos sociales del pasado, del presente y del futuro. Además, habrá una exposición permanente de restos arqueológicos.
En el interior del castillo había varios patios y edificios y la capilla de San Jorge. La parte noble del Castillo contenía dependencias administrativas y cinco viviendas. La presentación de los restos se realiza mediante un juego de luces y sombras que ofrecen una fiel imagen de la ciudadela.
En la zona donde se encontraban las audiencias secundarias, una producción audiovisual representa un proceso inquisitorial fabulado de una víctima ficticia.
Siguiendo el itinerario, el visitante se encuentra con los restos de la capilla de San Jorge. Un panel explica las calles interiores del castillo. El visitante puede contemplar las dependencias de la casa del inquisidor, así como las cocinas, las cuadras, y el patio central.
Por último, el visitante podrá entrar al Museo del Castillo de San Jorge de forma gratuita y a lo largo del recorrido se encontrará con la información en español e inglés y los folletos explicativos en 7 idiomas: español, inglés, francés, portugués, italiano, alemán y hebreo.