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Una moción consensuada por todos los grupos políticos municipales, que se votará este viernes, exigirá reparar el daño patrimonial descubierto gracias a la investigación realizada por Antonio Martín en ‘Los suelos ferroviarios de Sevilla: Saqueo de la ciudad’.

“Me siento honrado de que todos los grupos municipales se hayan unido para apoyar una moción como ésta que he promovido”, ha reconocido Antonio Martín. Así ha presentado la moción para instar a Renfe, Adif y a la Junta a compensar a la ciudad de Sevilla por los suelos ferroviarios en los que no se garantizó el derecho de reversión a la ciudad. Una presentación a la que han acudido integrantes de los cinco grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de Sevilla, entre ellos Susana Serrano. “Es muy importante que todas las formaciones hayan dado su visto bueno a esta reivindicación que desde hace años investiga Antonio Martín”, ha reconocido después de la presentación Serrano.

Una vez que el suelo ya no tiene el uso para el que se ha expropiado, ese suelo debe volver a sus propietarios, pero en este caso eso no ocurrió totalmente así. Según la investigación de Martín, al Ayuntamiento de Sevilla se le compensó por el 15% de los suelos entonces liberados, pero debería haber sido por el 71,29%. “Sevilla no fue bien tratada cuando se liberaron esos suelos del uso ferroviario, es el momento de compensar a la ciudad ahora que esos suelos tienen otros usos”, ha explicado Martín. Cuando se realizaron aquellos convenios en los años 90, los más de 350.000 metros cuadrados tendrían un valor de unos 450 millones de euros. Una cifra que hoy sería muy superior, por lo que Martín ha pedido a todas las partes que puedan entenderse para llegar a un acuerdo extrajudicial.

“Estos suelos afectan a diferentes zonas de la ciudad como Santa Justa, Macarena o San Jerónimo. Y vemos cómo hoy el interés privado se beneficia de ellos. Por ejemplo, en la zona de Plaza de Armas, Mercadona construye un nuevo supermercado”, ha expresado Serrano. “Esos suelos, una vez terminado su uso, se deberían haber devuelto a la ciudad. Ahora habría que pensar en la forma de compensación, que no tiene por qué ser directamente económica”, ha reconocido Serrano.