La delegada de Igualdad y Juventud, Myriam Díaz, asegura que antes de asegurar cualquier propuesta para solucionar la situación de ‘botellón’, como avanzó Espadas, primero deben escuchar a los afectados.
El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, anunció hace unos días la propuesta de poner en marcha una mesa de diálogo entre vecinos y jóvenes para analizar la situación actual de los botellones que tantos conflictos genera en las zonas céntricas. El alcalde abogaba entonces por estudiar posibles espacios para su desarrollo, que contaría con «distintas ubicaciones posibles y no un gran sitio».
“Hay que cumplir la ley que ahora no se cumple con la identificación de espacios; es necesario ponerle a todo esto mesura y sentido común”, comunicó recientemente Espadas al anunciar que rechazaba la idea de crear un solo macrobotellódromo, como han hecho otras ciudades y que ya ideó el ex alcalde Monteseirín.
En este sentido, las palabras de Espadas aludían a la creación de diversas zonas dispersas donde los jóvenes podrían concentrarse ocasionando menos molestias. Sin embargo, desde el PSOE matizan que aún no quieren adelantar ningún plan que pueda condicionar el diálogo que aún no ha comenzado entre los colectivos implicados. “Todavía no sabemos si vamos a trasladar las zonas”, concreta Myriam Díaz, delegada de Igualdad, Juventud y Relaciones con la Comunidad Universitaria.
“Primero tenemos que escuchar, pero está claro que esto tiene que ser una decisión que se tome entre todas las partes implicadas, queremos crear una mesa de consenso porque no podemos acordar una decisión a sus espaldas”, señala Díaz.
Desde hace años son constantes las denuncias de vecinos de los alrededores de Alfalfa, El Salvador, Gavidia, calle Betis, Alameda o la zona Radio Sevilla-Puente de Triana-río, quienes llevan denunciando la presencia de ruidos, suciedad, baja asistencia policial ante las llamadas del 112, y el incumplimiento de normativas que ha provocado el cierre de locales céntricos en los últimos meses.
En la oposición, críticas divididas. Mientras IU halaga la decisión de escuchar a los jóvenes y establecer una mesa de diálogo, Ciudadanos critica la preocupación de plantear un nuevo plan de botellones en rechazo a incentivar el consumo de alcohol.
“Hablar con los jóvenes y escucharlos es lo que hemos defendido nosotros en los últimos años”, incide el portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas. “Lo que me preocupa es lo de crear áreas como si fueran botellódromos”, aclara, “en ese sentido, no lo compartimos porque lo que hay que hacer es la alternativa de ocio a los jóvenes”. Un aspecto que también apoya Ciudadanos, pues Rojas rememora la época en la que gobernaron y abrieron centros deportivos para que los jóvenes pudieran practicar deporte por la noche.
Rojas no cree que la solución sea reunir a los jóvenes y desplazarlos a otros sitios como la Cartuja, por ejemplo, puesto que ello conllevaría problemas de movilidad ante el difícil acceso a esa zona, lo cual supondría tener que adaptar los transportes públicos “y eso sería otro problema”, razona.
Por otra parte, Javier Millán, portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sevilla, también trasladó hace unos días su apuesta por incentivar el deporte y la cultura como alternativas de entretenimiento ante los “botellódromos”, que no lo perciben adecuado, ya que esa propuesta significaría fomentar en los jóvenes el consumo de alcohol.
Desde Ciudadanos, la exigencia para solucionar los problemas vigentes es que se cumplan las ordenanzas municipales y se respeten los horarios. Pero desde el Gobierno municipal, Díaz incide en que lo principal es “no precipitarnos ni seguir dándole largas a la situación que hay que abordar, analizar las discrepancias y abordar una solución consensuada y unilateral”.
Comerciantes, vecinos y jóvenes, a través de diversas áreas de asociaciones juveniles, representación de institutos y universidad; están, por el momento, a la espera de la creación de esas mesas de diálogo, donde van a tener voz para abordar alternativas al ocio nocturno en el centro.