policia-cajas-tabaco-ilegal

La mercancía ilegal estaba oculta detrás de cuatro palés de ropa usada que transportaban hasta una planta de reciclaje.

Agentes de la Policía Nacional de Sevilla han detenido al conductor de un camión de gran tonelaje que iba cargado con 372.490 cajetillas de tabaco de contrabando, las cuales se encontraban ocultas detrás de cuatro palés de ropa usada que transportaban hasta una planta de reciclaje, según ha informado la Policía en un comunicado.

La Policía desarrolló durante el pasado año 2014 en Sevilla y su provincia distintas investigaciones contra el contrabando de tabaco, obteniéndose los primeros resultados en el mes de mayo, cuando se intervinieron en Camas más de 5.000 cajetillas que vendían en una tienda de ultramarinos y ocultaban en un falso techo del establecimiento, dentro de sacos de harina.

Ya en el mes de julio, la Policía detuvo a tres personas en San Juan de Aznalfarache como presuntas autoras de un delito de contrabando, incautándose de más de 3.000 cajetillas que eran repartidas para su venta por diferentes localidades del Aljarafe sevillano.

El pasado mes de octubre, esta vez en Sevilla capital, se detuvo a tres personas a las que se les incautaron un total de 12.715 cajetillas en la barriada del Polígono de San Pablo, donde se vendían al público en un kiosco. La mayoría del tabaco intervenido fue localizado en un local, existente en la misma plaza que el kiosco, que era utilizado por sus propietarios como almacén.

Continuando con las investigaciones sobre el contrabando de tabaco, funcionarios del Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Macarena detuvieron el pasado día 30 de diciembre al conductor de un camión articulado cargado con 372.490 cajetillas de tabaco ilegal.

Una vez abierta la puerta del ‘container’, se pudo comprobar que los primeros palés estaban llenos de ropa usada que transportaban a una planta de reciclaje. Asimismo, y cuando se continuó con la inspección del vehículo, se observó que el resto del contenido se correspondía con más de 700 paquetes de tabaco ilegal, portando cada una de ellos 500 cajetillas.