La Alfalfa prorroga su estatus de zona acústicamente saturada
La Asamblea Casco Antiguo de IU ha presentado una serie de propuestas ante la «campaña de cierre de bares» emprendida por el Ayuntamiento.
La federación de izquierdas reconoce el derecho al descanso de vecinos pero recuerda que «también existe el derecho al ocio» y ha instado a que debe existir una «convivencia». Esto requiere, según la formación, que «más allá de la propaganda a la que nos tiene acostumbrados, el Ayuntamiento apueste firmemente por el diálogo entre vecinos y empresarios del ocio, al objeto de adoptar medidas que hagan posible la convivencia».
El pasado fin de semana se volvió a precintar hasta once establecimientos de ocio nocturno en el Casco Antiguo, unas medidas que IU ha tachado de «electoralista» la política seguida por el Gobierno municipal por «dejar que el problema se agrave sin tomar medidas y, ahora, lanzando una campaña electoralista de cierre de bares».
«Como señalan otros actores involucrados en este conflicto (nos referimos a la misma Policía Local de Sevilla), el precinto de un bar debe ser la última medida, después de haber tomado otras que palíen el problema», ha afirmado IU.
Bares con identidad propia como la Peña Torres Macarena o la Carbonería han sido precintados, «y a continuación, se han ido precintando bares de forma selectiva y con una clara intención política. Así, se vuelve a intervenir en la Alameda, justo cuando el mismo Ayuntamiento llena de cosas sin sentido el bulevar, promueve fiestas de hermandades con barra callejera incluida o permite la privatización y acumulación de ruidos en el entorno del negocio de la Nave del Barranco”.
Izquierda Unida ha aprovechado también para denunciar el caso de la Alameda de Hércules. “El distrito Casco Antiguo se ha empleado a fondo para que este enclave deje de ser un espacio donde conviven distintas formas de entender el ocio en favor de la uniformidad. El mayor bulevar laico de Europa se está convirtiendo en una feria de muestras constante, donde asociaciones y hermandades afines realizan fiestas al aire libre, venden alcohol y ocupan la calle sin tener que pagar impuestos”.
Para IU, “la represión no es la solución. La represión selectiva es inadmisible en un Estado de Derecho. Es necesario un ejercicio colectivo de pedagogía: el disfrute de la ciudad no puede ir contra nuestros vecinos y vecinas”.
“Pero si no queremos que este conflicto se nos vaya de las manos, llamamos a los dueños de los bares, a los vecinos afectados, a usuarios de estos locales, y a todos los actores implicados, a iniciar un diálogo sin esperar a que el Gobierno de Zoido cambie su actitud. Que surjan las primeras propuestas, que pongan en la agenda política de nuestra ciudad la prioridad de la convivencia y el disfrute en Sevilla”. Por último, la federación ha advertido de la destrucción de empleo que esta campaña de cierre de bares puede provocar en la ciudad.