Está previsto que la obra finalice el 30 de septiembre, aunque el alcalde ha confiado en “acabarla antes de lo fijado, tal y como ya ocurrió el año pasado en actuaciones similares en Escuelas Pías o Feria, aunque lo fundamental es que el proyecto se haga bien”.

El Alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha visitado la calle Alfonso XII para revisar la obra de sustitución del adoquinado en la calzada y arreglos en las aceras y ha podido comprobar de primera mano que los trabajos se desarrollan a un “elevado ritmo que nos hace aventurar que puede estar finalizada antes del plazo previsto si no surgen inconvenientes, aunque lo fundamental es que se solucionen los desperfectos existentes”.

Zoido ha recorrido junto a la delegada del Distrito Casco Antiguo, Amidea Navarro, la calle Alfonso XII, que se encuentra en obras en el tramo desde la Plaza del Duque hasta Plaza del Museo, aunque también se llevarán a cabo arreglos puntuales de adoquinado y acerado en el tramo que va desde la Plaza del Museo hasta la calle San Laureano, esquina con calle Goles. En principio, la vía permanecerá cortada al tráfico en su totalidad hasta el 30 de septiembre, aunque el alcalde ha manifestado que “por lo avanzados que van los trabajos, es muy posible que finalicen antes de lo fijado, tal y como sucedió en varias de las obras similares que acometimos el pasado año, como la de Escuelas Pías o Feria. En cualquier caso, lo principal es realizar bien el proyecto y si tienen que acabar en el día previsto, no pasa nada”.

El alcalde ha recordado que “la coordinación entre el Distrito Casco Antiguo, la Delegación de Urbanismo y la de Movilidad ha permitido planificar muy bien la obra y habilitar vías alternativas para facilitar el tránsito de los vehículos, así como el acceso a los garajes. En este caso, los desvíos son por Jesús del Gran Poder, Conde de Barajas y Juan Rabadán y el acceso a los garajes de la calle Monsalves es por la Plaza del Museo, mientras que la calle Pedro del Toro ha cambiado su sentido, desde Bailén hacia Gravina, para dar salida a los garajes de esta zona”.

Además, ha comentado que “aunque los trabajos se realizan en los meses de verano precisamente para reducir lo máximo posible las molestias de los vecinos y comerciantes, es obvio que una obra de esta magnitud, que conlleva el corte total de la misma, provoca inconvenientes y por eso quiero agradecer su paciencia y comprensión. En cualquier caso, ellos son los primeros que son conscientes de que es imprescindible llevarla a cabo porque el adoquinado y la acera estaban dañados y hay que arreglarlos, porque así me lo han transmitido durante la visita”.