Terapias-PuntoFinal

Desde la psicología y la nutrición, María Eugenia Aberastain, lleva a cabo la terapia ‘punto y final’ para combatir la obesidad y el sobrepeso que afecta al 18% de los sevillanos.

Las terapias Punto Final que propone Aberastain trata de dar respuesta a los hábitos alimenticios de las personas con sobrepeso o con obesidad, reconocer sus pautas con la comida, y acompañar con terapia psicológica las recomendaciones de una nutricionista. Estas terapias, que lleva realizando más de cinco años en Sevilla, han hecho posible que a cientos de personas les haya cambiado la vida, sin ser “prisioneros de lo que comen”, sostiene su promotora.

La terapia surgió porque esta experta en la conducta de la obesidad se dio cuenta de que las personas cada vez tienen más adicción a la comida debido a «los componentes adictivos» que contienen las mismas. El cometido principal de esta orientadora es hacerles ver a estas personas que la vida está mucho más allá de la comida y hacerles fuertes para no caer en la tentación. Generalmente no se profundiza en algunos temas, ya que el 90 por ciento de la gente que acude siente y padecen los mismos problemas.

El lado más práctico de las terapias está en las dietas personalizadas que realiza el nutricionista y otra coordinadora que acompaña en esta hazaña a María Eugenia Aberastain. En el centro se prioriza a la persona y no a los kilos, indica la promotora, y se ofrecen técnicas de aprendizaje para reformular los hábitos alimenticios adquiridos y eliminar cuantas prácticas llegar a ser, aún sin saberlo, nocivas para el funcionamiento del organismo, adaptándose a unos nuevos hábitos.  

Casi todas las personas que acuden a estas terapias consiguen sus objetivo: bajar de peso, explican. Una de las alternativas que ha tomado este centro es la de crear terapias de mantenimiento para aquellos que han bajado el peso. Con esto lo que quieren conseguir es que la fortaleza que se han creado a lo largo del proceso de adelgazamiento se mantenga. Aunque reconocen que no tienen un número exacto de personas que se mantienen con su peso ideal, ya que las recaídas son habituales en estos casos, indican que el beneficiario vuelve para poner remedio a la situación.

La mayoría de las personas que acude a interesarse por las terapias que ofrecen no saben qué es lo que les ocurre, no saben porque tienen obsesión por la comida ni por qué sus mayores pensamientos se basan en ellas. Una de las asistentes a las terapias asegura que es la primera vez que está haciendo la dieta a rajatabla gracias a la motivación y a la ayuda psicológica de la experta. Para los miembros del centro es fundamental realizar una dieta teniendo un apoyo psicológico complementario al estudio y a las pautas nutricionales.

Entre todos contra el sobrepreso

En la ciudad de Sevilla se conocen pocos centros que se realice este tipo de tratamientos psicológicos para combatir el sobrepeso y la obesidad. El presidente de la Asociación Biriática Hispalis (ABH), Fernando Gómez Gálvez, sostiene que en la ciudad faltan asociaciones y centros dedicados expresamente al cuidado de las personas con obesidad y sobrepreso, donde se les preste apoyo psicológico, físico, educacional y nutricional. Por ello, es importante realizar un seguimiento psicólógico a aquellas personas que sufran esta enfermedad para darles un punto de vista técnico y adecuado para así combatirla.

Gómez Gálvez explica que el problema de salud pública que la obesidad supone en la sociedad alcanza a un 18 por ciento de la población en Sevilla con problemas de sobrepeso y obesidad. Asegura que la unidad de Cirugía General y Digestivo del Hospital Universitario Virgen Macarena se han generado, solo en trámites para operarse de obesidad, más de 450 solicitudes pero puntualiza que los casos de obesidad mórbida sí están disminuyendo sin pasar por el quirófano.

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