foto visita manos unidas

La Delegada del Gobierno en Andalucía ha expresado sus condolencias por el fallecimiento de tres miembros de una familia en Alcalá de Guadaíra, a la espera de que se determinen las circunstancias de la tragedia. 

La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, ha reiterado hoy la importancia de que todas las administraciones públicas, unidas y en colaboración con las redes de asistencia social de las ONG, se vuelquen en la atención coordinada a las familias más desfavorecidas.

Crespo ha hecho estas declaraciones durante la visita realizada a un local solidario de Manos Unidas en Almería, impulsado por un grupo de voluntarios cuyo trabajo se centra en la ayuda a países en desarrollo y a la que ha citado como “exponente del espíritu solidario del pueblo andaluz,tan  importante en estos momentos de dificultad”.

La delegada del Gobierno se ha referido a la tragedia vivida este fin de semana en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), en la que han fallecido un matrimonio y una de sus hijas y que “nos invita a reflexionar sobre la importancia de la solidaridad y la cohesión social”.

Tras trasladar sus “sinceras condolencias” al ayuntamiento de la localidad y a los allegados de los fallecidos, la delegada ha pedido prudencia sobre las circunstancias del suceso, a la espera de conocer los resultados de la autopsia y teniendo en cuenta que se ha decretado secreto de sumario.

Unidad y coordinación

Por otra parte, Crespo ha reiterado la importancia de que todas las administraciones, en colaboración con las redes de asistencia social de las ONG, se vuelquen en la atención coordinada a las familias más desfavorecidas. “Hay que dar respuesta a las necesidades sociales en estos momentos de dificultad, mejorando la eficacia de nuestro sistema de protección y dirigiéndolo a las personas más vulnerables”, ha manifestado.

Para la delegada, el Plan Nacional de Acción para la Inclusión Social 2013-2016 aprobado por el Gobierno el pasado viernes, y elaborado en colaboración con ministerios, Comunidades Autónomas, entidades locales y, de manera especial, con el Tercer Sector de Acción Social, es “un buen punto de partida”, ya que se trata de “un instrumento integrador de todas las políticas de lucha contra la pobreza y la exclusión social en España”.

Este Plan de Inclusión, el primero que se presenta desde el Plan 2008-2010, destinará más de 93 millones de euros al día para ayudar a las personas en situación de mayor vulnerabilidad.

Crespo ha destacado, además, que por primera vez, se incorpora un objetivo transversal de lucha contra la pobreza infantil, y habrá un Fondo Extraordinario de 17 millones íntegramente dedicado a la atención a las necesidades básicas de los menores

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