En la tarde del pasado martes, 8 de marzo, tuvo lugar una nueva agresión a una facultativa de Sevilla. Se produjo, concretamente, en el Centro de Salud La Candelaria de la capital hispalense y la víctima fue una médica de Familia que atendía, durante su turno, las urgencias.

Mientras atendía un caso de urgencias y tenía otro en espera, un enfermero que realizaba triaje consultó con la facultativa su opinión médica sobre una urgencia. Al finalizar la urgencía que atendía, procedió a valorar el caso con su compañero cuando la usuaria de la siguiente urgencia, que asistía con su hija de 15 años, la paciente, la increpa por atender antes la consulta de triaje, que la médico valoró como prioritaria.

Al explicárselo a la usuaria, ésta se puso como una energúmena porque no quería esperar unos minutos más, comenzando a agredir verbalmente y luego físicamente a la médica con arañazos y empujones, hasta que esta última cayó al suelo. Entonces, la hija adolescente comenzó a agredir a la facultativa golpeándola con su bolso.

Con el aviso de esta agresión, la Policía Nacional se personó en el centro. La víctima, que fue asistida en por el delegado de PRL del Sindicato Médico de Sevilla, Juan José Silva, ya ha mostrado su intención de presentar una denuncia a jurídica a través de la asesoría del Colegio de Médicos o el SAS.

Ante este hecho «deleznable», se ha producido una concentración de apoyo a la sanitaria agredida y de repulsa a las agresoras en la puerta del propio Centro de Salud de La Candelaria donde tuvo lugar el suceso, una concentración a la que han asistido el  director gerente del distrito Sevilla, José León-Sotelo, así como la dirección y personal sanitario del centro, y delegados del SMS.

Desde el Sindicato Médico de Sevilla han querido recordar que la situación «de sobrecarga asistencial» que sufren los facultativos sevillanos, especialmente en Atención Primaria «no ayuda, precisamente, a evitar este tipo de incidentes». Necesitamos que la Administración mejore, por un lado, las condiciones laborales de la AP andaluza y, por otro, que la normativa sea más dura contra los agresores.