Un estudio de la Universidad Pablo de Olavide demuestra que el abandono de proyectos urbanísticos en la costa, crea problemas a la biodiversidad, economía e incluso al propio paisaje. A esto se suma el efecto que causa en la sociedad, al desaparecer los puestos de trabajo.
Sevilla Actualidad. Crisis. Investigadores pertenecientes al grupo Áreas Dinámicas Naturales y Antrópicas (ADINA) de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) han realizado un estudio del impacto de proyectos urbanísticos abandonados en las zonas costeras de nuestro país, bajo una perspectiva a corto plazo y a largo plazo.

En los tiempos en los que nos encontramos, con una crisis económica e inmobiliaria más que importante, son muchas las empresas dedicadas al sector que han quebrado o están a punto de hacerlo, con todo lo que ello supone. Es decir, que sean muchos los proyectos urbanísticos que han sido abandonados a medio hacer e incluso concluidos.

En el estudio, se ha demostrado, que esté hecho no solo afecta a la economía y a la sociedad; el número de parados aumenta, empresas que dependían de estas y otras construcciones se ven abocadas a la bancarrota, etc. Son, además, muchos los que encuentran en estos edificios, generalmente en ruinas, su hogar. Un hogar que termina convirtiéndose en vertedero viviendo en muy malas condiciones y sin un correcto tratamiento de residuos, con los riesgos para la salud que esto conlleva.

También afecta y, sobre todo, al medio ambiente, en cuanto que hablamos de paisaje y biodiversidad. Es, de hecho, este el ámbito principal del estudio. El abandono de construcciones puede provocar la infertilidad y erosión del suelo, además de la clara contaminación. “La topografía original cambia sustancialmente una vez empieza el proceso de urbanización, encontrándose a menudo montañas de tierra y grava, desechos o cobertura de asfalto”, señalan en el estudio.

A pesar de ello, ven el futuro con ilusión y esperanza pues es propio estudio señala sustanciales mejoras con el nuevo entramado legislativo, especialmente en lo relativo a la responsabilidad social. Pero aún así, queda camino por recorrer para recuperar la conciencia y la responsabilidad medioambiental. 

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