Agentes del Grupo UROM (Unidad Regional Operativa Medioambiental) de la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía en Sevilla detuvieron el pasado 15 de diciembre a dos varones por un presunto delito de tráficos de residuos altamente contaminantes procedentes de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE).

Así, se les acusa de la comisión de los delitos de receptación, contrabando y contra los recursos naturales y el medio ambiente por realizar tareas de acumulación, manipulación y exportación de este tipo de material careciendo de cualquier permiso o habilitación.

La investigación, en la que ha colaborado el Servicio de Vigilancia Aduanera, ha permitido la intervención de ocho toneladas de residuos muy peligrosos por su alto valor contaminante, así como 3000 bombonas de butano que contenían restos de gases licuados del petróleo, valoradas en más de 18.000 euros.

Los detenidos se dedicaban a adquirir y almacenar este tipo de maquinaria para posteriormente exportarlos a su país de origen, donde el control de su gestión es inexistente. Y es que, una vez en destino el material era desmontado para acceder a los componentes que tienen valor económico, siendo el cobre lo más preciado.

Esta práctica hace imposible la reutilización del producto y también que aceites y gases clorofluorocarbonados, clasificados por la Unión Europea como muy peligrosos o altamente contaminantes, se liberen sin control provocando un daño irreparable en la capa de ozono agudizando el calentamiento global del planeta.

El material fue intervenido tras los registros practicados en las naves industriales que los detenidos utilizaban como almacén, ubicadas en polígonos industriales de las afueras de la Sevilla. También se registró el interior de un contenedor, que pretendían enviar a su país de origen a través del Puerto de Valencia.

Tras la puesta a disposición judicial los detenidos han quedado en libertad con cargos, se les ha prohibido su salida del territorio nacional junto a la retirada de sus pasaportes y tienen que presentarse periódicamente ante la autoridad judicial.