La Audiencia Nacional ha condenado a un joven marroquí de 24 años por planear un atentado yihadista en la Semana Santa de 2019. El joven ha sido condenado a ocho meses y 29 días de prisión, un año y medio de inhabilitación absoluta y otro año y medio de inhabilitación especial. Se le imputa un delito de auto adoctrinamiento y auto capacitación terrorista con la atenuante de confesión y cooperación tardía, según la sentencia que recogen Agencias.
El joven fue detenido el pasado 17 de abril de 2019, Miércoles Santo, en Marruecos cuando asistía, según informaban entonces algunos medios de comunicación, a «despedirse de su familia», aunque fuentes de la investigación consideraban que sus planes eran aún «embrionarios». El condenado pretendía así perpetrar un atentado yihadista en pleno centro de Sevilla durante la Semana Santa.
El presunto yihadista fotografió lugares céntricos de la ciudad, como la Catedral o el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán, tal y como encontraron los agentes en el registro efectuado en su vivienda de Su Eminencia en la tarde del mismo Miércoles Santo, cuando pretendía atentar. De igual forma, los agentes consideraron improbable que pudiera efectuar el atentado, dado que no poseía, «la infraestructura necesaria para perpetrarlo».
Sus vecinos entonces declararon a los medios de comunicación que «llegó junto a miembros de su familia hace un año y medio y que casi siempre mantenían la casa cerrada». El condenado mantenía su adhesión a postulados de DAESH, así como una formación en fabricación casera de explosivos para el atentado suicida que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado terminaron frustrando.