El número de denuncias por violencia de género presentadas en la provincia entre enero y el 31 de octubre de 2021 ha sido de 1338, lo que ha supuesto una disminución de las mismas en un 1,6 % respecto al mismo período del año 2020. La incidencia por cada 10.000 mujeres mayores de 15 años es de 67, incidencia inferior a la de Andalucía (120) y España (74).
En Sevilla, la incidencia de mujeres asesinadas por violencia de género por cada 100.000 mujeres mayores de 15 años es de 4,3, situándola por debajo de la media de Andalucía (6,3) y de España (5,5). Cabe destacar el importante papel que juegan los servicios públicos municipales debido a la proximidad a las víctimas, lo cual permite la implementación de medidas de acompañamiento y vigilancia más exhaustivas.
En Andalucía, en lo que va de año, han sido asesinadas siete mujeres, lo que supone un descenso con respecto a los dos años anteriores, donde las mujeres asesinadas superaron la decena. Sobre el total de España, las mujeres asesinadas en Andalucía representan el 18,91 %, por lo que, al igual que ocurre en el acumulado de 2003, una de cada cinco mujeres asesinadas en España, era andaluza.
La cifra de mujeres víctimas mortales de violencia de género en España desde 2003 hasta el 31 de octubre de 2021 es de 1117 mujeres. En 2021, a fecha de 23 de noviembre de 2021, el número de víctimas mortales ha sido de 37, lo que supone el mínimo de todo el periodo con datos.
Víctimas mortales en Sevilla
Hasta el 31 de octubre de 2021 se han registrado dos víctimas mortales por violencia de género en Sevilla, y de acabar así el año, se volverían a ver datos como los del año 2015, donde fueron asesinadas cuatro mujeres. A excepción de los años 2008 y 2014, en los que no se registró ninguna muerte por violencia de género, en todos los años del periodo 2003-2021, la provincia de Sevilla ha registrado víctimas asesinadas por violencia de género, hasta alcanzar las 40 mujeres asesinadas (17,9% del total de Andalucía).
Los peores años han sido 2004, 2010 y 2015, en los que cuatro mujeres fueron asesinadas en cada uno de esos tres años. Asimismo, el índice de mujeres víctimas mortales de violencia de género es de 4,9 por cada 100.000 mujeres mayores de 15 años.
Mujeres víctimas mortales de violencia de género por año
Según los datos extraídos de la Delegación del Gobierno para la violencia de género, en cuanto a la nacionalidad de las mujeres asesinadas en Sevilla entre enero y el 31 de octubre de 2021, las dos mujeres eran de nacionalidad española, al igual que la de sus agresores.
En cuanto a la relación existente entre víctima y agresor, entre enero y el 31 de octubre de 2021, una de las mujeres había sido asesinada por su pareja y la otra lo fue por su expareja. En cuanto a la situación de convivencia de la víctima con su agresor, una de ellas convivía con él, no existiendo convivencia en el segundo caso. En Sevilla, ninguna de las víctimas había interpuesto denuncia.
«Los discursos misóginos disuaden a las mujeres de denunciar la violencia machista»
CCOO de Sevilla alerta de que los discursos misóginos de la extrema derecha disuaden a las mujeres a la hora de denunciar la violencia machista. La secretaria de Mujer e Igualdad de CCOO de Sevilla, Pepa Bermudo, ha asegurado que «la bajada en el número de denuncias no significa, desgraciadamente, que las violencias sufridas por las mujeres hayan descendido también». De hecho, «es un peligro que las ideas misóginas que propaga la ultraderecha estén provocando el rearme del patriarcado mientras las mujeres continuamos soportando violencia psicológica, física, económica o sexual», ha señalado Bermudo.
En este sentido, la secretaria de Mujer e Igualdad de CCOO de Sevilla ha recordado a Carmen y Rocío, las dos sevillanas asesinadas por su pareja y expareja, respectivamente, y ha advertido de que en ninguno de los casos existían denuncias previas: «La violencia de género no es un asunto privado. Es crucial que toda la sociedad se implique para acabar con ella».
Por eso, el Sindicato ha exigido el refuerzo de los servicios públicos que atienden a las víctimas mediante el aumento de personal y la formación del mismo, así como de la prevención en el ámbito educativo, reclamando la aplicación de los planes de igualdad, que tienen carácter obligatorio, en los centros escolares.