Sevilla ha sido la ciudad escogida para arrancar la prueba piloto de este nuevo modelo que cuenta con ciclomotores eléctricos cero emisiones para repartir cerveza por el centro de Sevilla. Desde este lunes ya han podido verse por las históricas calles del barrio de Santa Cruz. Un proyecto pionero, que coloca a Sevilla en la estela de otras ciudades europeas que apuestan por planes de movilidad sostenible, como Estocolmo o Londres.

Cruzcampo abre paso al reparto verde en Sevilla con un proyecto Última Milla, pionero en España, que arranca en la capital hispalense con el objetivo de extenderse a otras ciudades del país, y que busca evitar la emisión a la atmósfera de más de 21.450 toneladas de CO2 cada año en la ciudad.

Vehículos eléctricos de reparto de cerveza de Cruzcampo en Sevilla

El Piloto Sevilla Última Milla es una nueva apuesta de la cervecera por la colaboración público-privada. El acuerdo firmado con el Ayuntamiento hispalense a través de Aussa, la empresa encargada de gestionar los aparcamientos públicos, busca testar los beneficios ambientales y sociales de esta iniciativa para diseñar el plan más adecuado, que fomente la movilidad y el transporte sostenible en la ciudad.

Entre los objetivos se encuentran la lucha contra el cambio climático y crear espacios de vida más agradables en los núcleos urbanos: descongestionando el tráfico, reduciendo la contaminación acústica y visual, mejorando la calidad del aire y la salud de los ciudadanos, y al mismo tiempo cuidando el suelo histórico y el patrimonio cultural de los cascos antiguos.

Ciclomotores verdes para repartir cerveza

Los nuevos ciclomotores eléctricos han sido específicamente diseñados para el transporte de cerveza. Con una capacidad de carga de hasta 500 kg (8 barriles), una autonomía de 150 kilómetros en desplazamientos urbanos y una cilindrada de 49 centímetros cúbicos. A ello añaden que sus reducidas dimensiones -solo un metro de ancho y 2,9 metros de largo- y su menor peso les permiten circular por las calles más estrechas a una velocidad de 7 km/h.

La movilidad sostenible es un desafío necesario para cumplir el objetivo de neutralidad climática que la Unión Europea se ha fijado para 2050. Este implica reducir un 90% las emisiones vinculadas al transporte. Y especialmente urgente en países como España, donde hay más de 24,5 millones de coches en circulacióncasi uno por cada dos españoles– y el 82% de la población vive en núcleos urbanos.

El Ministerio para la Transición Ecológica ha presentado recientemente el borrador de su Plan Nacional de Energía y Clima, una estrategia para cumplir con el Acuerdo de París contra el cambio climático que define las prioridades para 2050 en materia de reducción de emisiones en núcleos urbanos. Todo ello para que las personas puedan disfrutar de una mejor calidad de vida en ciudades más seguras, inteligentes y sostenibles.