Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Cáceres desarticularon el pasado 23 y 24 de agosto un clan familiar dedicado al cultivo y al tráfico de drogas. La operación ha terminado con siete hombres y dos mujeres detenidos, pertenecientes al mismo grupo criminal, acusados de un presunto delito contra la salud pública por tráfico de drogas.

La «Operación Dumbo», como ha sido denominado el operativo, se inició en el mes de junio, cuando el grupo de estupefacientes de la Comisaría de Cáceres recibió informaciones referentes a un clan familiar. Estos estarían distribuyendo grandes cantidades de cocaína, marihuana y hachís en la ciudad de Cáceres.

Los investigadores centraron las investigaciones en la identificación de los miembros de este grupo, consiguiendo su objetivo y estableciendo los roles que cada investigado asumía. Entre ellos, encargados del transporte de la sustancia hasta la ciudad de Cáceres, distribuidores de la sustancia entre las diferentes casas en las que se guardaba y vendía para, finalmente, blanquearlo.

Los miembros del clan llevaban un alto nivel de vida

Los agentes se han encontrado con enormes dificultades debido a las medidas de autoprotección que adoptaba este clan familiar en su actividad ilícita. Los miembros conducían a gran velocidad sin respetar límites ni señalización y usaban vehículos lanzaderas en el transporte de sustancias estupefacientes. Además, disponían de inmuebles donde ocultar la sustancia, con el único fin de evitar posibles acciones policiales.

Los agentes, durante la investigación, se percataron del alto nivel de vida que llevaban. Hacían uso de numerosos vehículos, vestían ropas de primeras marcas, motocicletas exclusivas y fueron vistos continuamente en establecimientos de hostelería. Asimismo en el estudio patrimonial de los bienes que poseen, se ha podido comprobar cómo sin tener ingresos legales, los miembros del clan familiar habían adquirido numerosos inmuebles, con el objetivo de tratar de blanquear con ello los bienes procedentes del tráfico de drogas.

Un desplazamiento hacia Sevilla

Fue en una de estas vigilancias discretas, concretamente el pasado día 23 de agosto, cuando se detectó un desplazamiento a la localidad de Olivares. Fue uno de los máximos responsables del clan familiar, en un primer vehículo un matrimonio y en el segundo el hijo de estos.

Durante todo el trayecto de regreso a la ciudad de Cáceres, viajó en primer lugar el matrimonio, como vehículo lanzadera, encargado de avisar de la posible presencia policial al turismo que precedía. Esto llevó a pensar a los agentes actuantes que el segundo vehículo podría transportar algún tipo de sustancia adquirida en la localidad sevillana. Por ello, se estableció un dispositivo control policial con la intención de parar este turismo, aunque el investigado trató de eludir dicho dispositivo huyendo de la ciudad.

Al no lograr su propósito, se le dio el alto y se localizó una bolsa que contenía 136 tabletas de hachís con un peso de 13´5 kilogramos. Inmediatamente se procedió a su detención como presunto autor de un delito contra la salud pública, concretamente tráfico de drogas.

Al mismo tiempo otra patrulla de la brigada provincial de seguridad ciudadana procedía a la detención de los dos investigados, acusados de los mismos delitos que el anterior.

Registros en Sevilla

Tras esto y con la preceptiva autorización judicial, se realizaron un total de siete registros domiciliarios. Tres en Cáceres, uno en Mérida, otro en Pitiegua y dos en Sevilla.

Con este operativo se han desarticulado tres cultivos indoor e intervenidos 84 kilogramos de marihuana, 14 kilogramos de hachís, tres pistolas, (dos del calibre 9mm y una detonadora), tres escopetas del calibre 12, una carabina de calibre 6.35mm, dos puñales de grandes dimensiones, cinco vehículos y una motocicleta, así como los diferentes útiles necesarios para la venta, distribución, el cultivo de la marihuana y la venta de las diferentes sustancias.

Los detenidos, siete hombres y dos mujeres, de entre 33 y 57 años de edad, contando la mayoría con antecedentes anteriores, tras la tramitación del pertinente atestado, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que decreto el ingreso en prisión de dos de ellos. Significar que la investigación continúa abierta no descartando nuevas detenciones.