Un grupo de brasileños residentes en la ciudad han organizado una concentración el lunes en la Plaza Nueva en apoyo a las manifestaciones iniciadas en São Paulo hace una semana.

Las movilizaciones ciudadanas de los últimos años, tanto en España como en Grecia, el mundo árabe o Turquía, tienen un aspecto en común: el uso de las redes sociales. Facebook ha sido la plataforma más utilizada para organizar la reciente oleada de protestas en Brasil, que han puesto en jaque al gobierno de Dilma Rousseff, aprovechando el tirón mediático que supone la celebración de la Copa Confederaciones de fútbol en el país.

Estas redes sociales tienen eco en todo el mundo, por ello las reivindicaciones han llegado hasta Sevilla, donde un grupo de brasileños residentes en la ciudad, con apoyo de personas de otros países, han organizado, también mediante Facebook, una concentración mañana en la Plaza Nueva para apoyar las protestas de Brasil, que han sacado a más de un millón de personas a la calle en los últimos días.

El acto, que no se descarta que derive en manifestación, dará comienzo a las 19:00 horas y servirá para revindicar, principalmente, «la mejora de los transportes públicos y la reducción de las tarifas de los autobuses; la transparencia en cuanto a los recursos del Mundial de 2014 y la oposición a la actuación violenta de la Policía Militar en todo el país», según explica Juliana Afonso, una de las organizadoras del evento que se está difundiendo por Internet.

Los aspectos que se reclamarán en Sevilla coinciden con los que está revindicando el pueblo de Brasil en unas movilizaciones pacíficas que dieron comienzo cuando el ‘Movimiento por el Pase Libre’ convocó una manifestación contra el aumento de precio en el transporte público de São Paulo. A esta petición se le fueron sumando otras muchas hasta desembocar en un movimiento masivo y hetereogéneo, sin líderes definidos, que ha llevado en ocasiones a enfrentamientos con la policía y ha causado al menos dos muertos.

Crecimiento sin cambios sociales

«Hospitales, escuelas, transporte público, autovías, seguridad… Absolutamente todos los servicios públicos funcionan de forma precaria llevando a los brasileños a un nivel insostenible de calidad de vida», comenta Juliana. Los organizadores del acto en Sevilla consideran que el crecimiento económico del país aún no ha repercutido en cambios sociales para la mayoría de la población: «Mientras Brasil mantiene a los políticos más caros del mundo, 13 millones de personas se encuentran en la extrema pobreza y 8 millones de familias aun no tienen casa», agregan en un comunicado.

Dilma Rousseff, presidenta de Brasil, aplazó un viaje oficial a Japón para reunir a su Gobierno y analizar las protestas espontáneas de la población. El viernes, la sucesora de Lula da Silva apareció por televisión para lanzar un mensaje de apoyo a la calle, garantizando que iba a convocar a los gobernadores y a los alcaldes de las principales ciudades para negociar un gran pacto de servicios públicos, al tiempo que se comprometió a recibir a los representantes de las organizaciones que están mostrando su malestar con la situación del país.

Pese a ello, todo indica a que las protestas continuarán, principalmente en São Paulo, Río de Janeiro y las ciudades sede de la Copa Confederaciones. En Sevilla, mientras tanto, algunos de los más de cuatrocientos miembros del grupo de Facebook, han cambiado la foto de su perfil por un recuadro verde, seguido de un mensaje que dice: «Ven a la Plaza Nueva, día 24 de junio, lunes, a las 19 horas y presta tu solidaridad al pueblo brasileño. Esta es una lucha mundial por sistemas políticos y económicos más justos y eres parte de esta lucha».

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