La Hispalense ha acordado elevar una demanda de diversos colectivos de estudiantes a la Junta de Andalucía para que se permita el pago fraccionado y en los plazos en que se estime convenientes de las matrículas. La institución pretende sostener también la caída de matriculas como consecuencia del endurecimiento del criterio para concesión de becas y la actual crisis económica que impide a muchos estudiantes el acceso a la Universidad de Sevilla.

El Consejo de Gobierno de la Universidad de Sevilla ha acordado este martes solicitar a la Junta de Andalucía  la modificación del Decreto de Precios Públicos y Tasas de Grado, Máster y Doctorado para que cada universidad pueda fraccionar el pago de las matrículas en los plazos que estime conveniente.En la actualidad, la citada normativa limita a dos el número máximo de pagos fraccionados.

La iniciativa la elevaron diversos colectivos de estudiantes con el propósito de aliviar la situación que padecen muchos estudiantes que no tienen acceso a la universidad como consecuencia del endurecimiento de los criterios para la concesión de la beca por parte del Ministerio de Educación, y de las dificultades económicas por la crisis. No obstante, debe contar con el visto bueno de la Junta de Andalucía, modificando el decreto que legisla dicho aspecto, para permitir ampliar los plazos de pago.

La caída de las matrículas ha supuesto una merma para los ingresos de la institución académica, que se suma a la caída presupuestaria derivada de las medidas de austeridad del Gobierno de España y de la Junta de Andalucía.

La portavoz del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus), Nerea de Tena, explicó que el rector Antonio Ramírez de Arellano estaba dispuesto a defender el el Consejo Andaluz de Universidades (CAU) esta modificación.

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