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El Ayuntamiento admite que desmanteló la antigua comisaría

La constructora contradice a Demetrio Cabello y atribuye al Consistorio la “responsabilidad directa” en el expolio.

La constructora andaluza Detea ha negado hoy que tuviera intención de demoler los edificios que adquirió al Ayuntamiento en la Isla de la Cartuja. Al mismo tiempo ha considerado que el Consistorio sevillano ha evidenciado «su responsabilidad directa» en el expolio que sufrieron los mencionados inmuebles el pasado mes de junio.

Detea responde así a las declaraciones del delegado de Seguridad y Movilidad, Demetrio Cabello, quien admitió la participación del Ayuntamiento de Sevilla en el desmantelamiento de la antigua comisaría de Policía de la Cartuja por existir “indicios” de que la intención de Detea era “demoler los inmuebles”.

En un comunicado, Detea, afirma que «en ningún momento y de ninguna forma» trasladó ese mensaje a algún representante municipal. Es más, la empresa asegura que, «nunca, nadie del Ayuntamiento se ha dirigido a nosotros, ni oficial ni extraoficialmente, para preguntarnos sobre nuestra intención de uso de esos inmuebles». La constructora señala que su intención era «trasladar su sede a dichos edificios, así como dedicarlos a alquiler».

En este sentido, considera «gravísimas» las declaraciones efectuadas por el delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla, unas afirmaciones que, a su entender, «evidencian la responsabilidad directa del Ayuntamiento en los hechos».

En este punto, la compañía andaluza considera que esas manifestaciones públicas «dejan patentes y agravan si cabe más la responsabilidad del Ayuntamiento en el expolio y desmantelamiento de unas propiedades por la que Detea pagó más de 25 millones de euros».

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