Sevilla ha presentado una alianza turística junto a Barcelona ante operadores y agentes turísticos de los sectores de la cultura, el arte y los medios de comunicación. La alianza entre Sevilla y Barcelona se estrena así en un mercado estratégico para
ambos destinos. Francia es el primer emisor de turistas extranjeros para Sevilla con una cuota de mercado del 16 % en 2020 y con la previsión de que crezca hasta al 20,47 % en 2021. En su año más alto, 2019, alcanzó los 241.000 viajeros y las 670.000 pernoctaciones (en el caso de Barcelona, el mercado francés es el tercero después de Reino Unido y Estados Unidos). El gasto medio en Sevilla del turista francés es de 332 euros.
La conectividad de Sevilla con Francia es clave gracias principalmente al aeropuerto
de Sevilla. En el año 2019 los vuelos con origen/destino en este país representaron
el 21 % de todas las llegadas internacionales destacando los enlaces con Lyon, París,
Burdeos, Marsella, Nantes o Toulouse. Durante la presentación se ha hecho especial referencia a la seguridad de los destinos turísticos para el mercado francés gracias al cumplimiento de todas las recomendaciones sanitarias ante la crisis sanitaria y al avance de la campaña de vacunación.
La alianza entre Sevilla y Barcelona tiene como eslogan de ‘Dos ciudades, un destino’, y visibiliza un relato compartido, a la vez que diferenciado, sobre cinco ejes: sostenibilidad, gastronomía, arquitectura, literatura y moda. Esta colaboración se sustenta, asimismo, en las excelentes conexiones entre las ciudades de Sevilla, Barcelona y París vía avión y tren y cuenta con un marco de colaboración público- privado.
A esta campaña en París se llega de la mano de diez empresas, de ellas cuatro sevillanas, otras cuatro catalanas, Renfe y Vueling. Igualmente, la iniciativa cuenta con el apoyo y la colaboración de Turespaña, la Oficina Española de Turismo en París (OET) y la Embajada de España en París.
Dos destinos en un único viaje
Dos destinos en un único viaje nutrido con una diversidad de recursos sobre la base
de la sostenibilidad, la hospitalidad, el bienestar, la conectividad, la innovación y la seguridad. Dos por uno con una imagen de calidad y destacando algunos de estos cinco productos de un mismo discurso uniendo ambas ciudades.
Ambas son ciudades milenarias, fundadas antes de la era cristina e influidas por la
luz del Mediterráneo y con la herencia culturales de los diferentes pueblos y civilizaciones que han ido pasando dando forma a sus identidades respectivas.
Su legado histórico, patrimonial, cultural, sus tradiciones, el arte, la literatura, la gastronomía convergen en una misma visión de futuro sin olvidar sus raíces. Ambas ciudades, adaptándose a los cambios como ciudades dinámicas, innovadoras, inteligentes y sostenibles: digitalización, movilidad, economía circular, menor impacto en el medio ambiente.