Es habitual que durante el verano aumente el número de robos en las viviendas debido a la movilidad y a la estancia prolongada fuera del domicilio. Para ello las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han puesto en marcha una campaña de prevención de estos robos en domicilios. A través de sus redes sociales han dado a conocer algunas de las características comunes entre los ladrones y sobre su forma de operar.

El perfil de los ladrones

Por lo general los atracadores son hombres de mediana edad, de buena apariencia y que se muestras educados y corteses. Suelen llevar ropa ligera y alguna mochila o algo similar para transportar sus herramientas. Nunca actúan solos, sino en parejas. Hablan poco para no delatar su acento. Normalmente, antes de acceder a la vivienda, emplean varios días en la vigilancia del domicilio y en dejar marcas como, por ejemplo, unas piezas de plástico transparentes que colocan en el cierre de la puerta. Esto les sirve para comprobar si alguien ha entrado o salido del lugar. También se fijan en la posición del felpudo o en el estado del buzón.

Bumping

El método con el que operan es el denominado como bumping, que consiste en introducir una llave manipulada en el cilindro de la cerradura y dar golpes para hacer saltar los pistones y conseguir que se abra la puerta. Para esta operación solo se necesitan 30 segundos.

La Policía ha pedido a los ciudadanos que estén atentos a los extraños que accedan a su bloque de pisos y que se fijen en las puertas para detectar estas marcas. Si se observa algún elemento sospechoso, se debe contactar con la Policía o con los Servicios de Emergencias: 091, 092, 062, 112. También se puede contactar con Emergencias a través de su cuenta en Twitter: EmergenciasSev.