Terraza en Sevilla
Terraza en Sevilla/Archivo

El primer fin de semana tras el fin del estado de alarma no ha dejado indiferente a nadie. Numerosas han sido las imágenes que han recorrido las redes sociales mostrando aglomeraciones de jóvenes en distintos puntos de España. El fin de las restricciones ha supuesto, para muchos, el fin del coronavirus. La hostelería ha mostrado su indignación tras este primer fin de semana tras el estado de alarma.

Sevilla no ha sido una excepción en las aglomeraciones y el descontrol vividos en la primera noche tras el fin del estado de alarma. Al menos, es lo que muestran los vídeos grabados por transeúntes y participantes en zonas como la Alameda de Hércules.

La hostelería indignada tras el fin del estado de alarma

Los hosteleros de Sevilla se han mostrado indignados ante los desmadres producidos en durante el primer fin de semana del fin del estado de alarma. En ese sentido, la hostelería lamenta las numerosas concentraciones de jóvenes que ha habido en puntos como la Alameda, el Paseo de Colón o la zona del Arenal. En estos enclaves se han realizado botellones y reuniones en grupos sin distancia de seguridad y sin mascarillas.

Según el presidente de la patronal, Antonio Luque: “nos parece lamentable que haya tanta gente tan imprudente a estas alturas. Se ha acabado el estado de alarma, pero no la pandemia. Por lo que rogamos a la ciudadanía y a nuestra clientela que respete este marco de desescalada porque para esto se han dictado unas normas, para volver a la normalidad poco a poco. Del mismo modo se lo hemos pedido a la hostelería y ha respondido este fin de semana”.

En ese sentido, la asociación reclama a la Junta de Andalucía el endurecimiento de la sanción que se impone por la práctica ilegal del botellón. La normativa establecida para la hostelería establece que la restauración cierre a las 00:00 y los bares de copas a las 02:00. Este hecho no ha impedido a numerosos sevillanos reunirse en domicilios este fin de semana tras esa hora. En ese sentido, Luque apela una vez más a la responsabilidad. «Sabíamos que las fiestas privadas se iban a producir, por lo que rogamos máxima sensatez y cordura. El virus sigue entre nosotros, los hospitales siguen recibiendo nuevos pacientes en la UCI, y si volvemos hacia atrás en cuanto a contagios, la hostelería será la primera en pagar las consecuencias. Todos tenemos que hacer de esta desescalada un camino de no retorno y remar juntos hacia la misma dirección».

Andalucía, la comunidad «más tranquila»

La hostelería no ha sido la única indignada tras el fin del estado de alarma. Sin embargo, Andalucía ha sido la comunidad «más tranquila» en medio del caos que ha supuesto el fin de las restricciones. A pesar de haberse visto imágenes lamentables en distintos puntos de Sevilla, lo cierto es que la comunidad ha sido la más «light».

Así, Juan Rambla, presidente de Andalucía de Noche, en declaraciones a Sevilla Actualidad, decía que «en Andalucía en general ha estado bastante tranquilo, comparándolo con el resto de España». Añadía que «gracias a que el ocio nocturno estaba abierto, cuando llegó el momento del fin del toque de queda, la gente se refugió en otros establecimientos y se evitaron un montón de incidentes».

Desde Andalucía de Noche dicen «no entender por qué, ya que no existe el toque de queda y la gente puede permanecer en la calle, las playas, los parques, o incluso hacer fiestas privadas, hasta la hora que quieren y con el número de personas que quieran, no se les permite a los hosteleros tener el horario habitual. Así, se evitarían las aglomeraciones de las 02:00 de la mañana, porque cuando a este hora se cierran todos los establecimientos al mismo tiempo, toda la gente la echamos a la calle a la misma hora. Nadie se va a dormir a las 02:00 de la mañana. Mientras que, si cada uno tuviera su horario, si pudiésemos estar hasta las 07:00 de la mañana, pues habría gente que se iría a las 02:00, otros se irían a dormir a las 03:00, a las 04:00 o a las 05:00. Así el cierre sería escalonado y no se producirían esas concentraciones que se van a producir siempre y cuando la hora de cierre sea la misma».

Periodista. Comunicando y aprendiendo de todo a mi alrededor. Involucrada en el periodismo social.