Magnolio junto a la Catedral / Ayto.
Magnolio junto a la Catedral / Ayto.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través del Servicio de Parques y Jardines, ha licitado la elaboración por parte de una empresa especializada del primer Catálogo de Árboles Singulares y Grandes Ejemplares de la ciudad, con el objetivo de identificarlos atendiendo a su singularidad botánica, cultural o paisajística, analizar su estado y dotarse de conocimiento e instrumentos particulares y efectivos para una correcta gestión y protección.

Con un presupuesto de 21.780 euros, el plazo de ejecución del contrato, cuyos pliegos fueron aprobados el pasado viernes en Junta de Gobierno Local, será de diez meses, una vez adjudicado y formalizado.

“Aunque es conocido que la ciudad cuenta con árboles individuales y grupos de árboles cuyas características los hace dignos de especial reconocimiento y protección, no existe un catálogo que los recoja y la actuación sobre ellos en cuanto a las podas y otros tratamientos se sustenta sobre la profesionalidad, la experiencia y el buen hacer de los técnicos de Parques y Jardines. Con este catálogo, los técnicos tendrán herramientas de protección más efectivas y planes específicos para el mantenimiento y la conservación de estos templares singulares”, ha explicado el delegado de Transición Ecológica y Deportes, David Guevara.

Los árboles singulares de Sevilla

La elaboración del catálogo, que incluirá árboles, palmeras y arboledas singulares, estaba contemplada en el Plan Director del Arbolado de Sevilla. Se trata no sólo de asegurar la pervivencia en el mejor estado posible de los ejemplares actuales, sino también de proponer otros que pudieran adquirir en un futuro la categoría de singulares. “De esta manera, se iniciaría un seguimiento especial de su evolución y, en consecuencia, comenzarían a tomarse medidas específicas y preventivas para su conservación”, ha agregado Guevara.

Junto con la identificación y su localización georreferenciada, la empresa adjudicataria deberá confeccionar un plan individual de gestión para cada árbol o conjunto arbóreo catalogado, con una ficha detallada. Esta deberá contener información contrastada sobre la singularidad de cada uno de ellos, bien sea botánica, histórica, cultural o paisajística, y su relación con la evolución del entorno urbano donde se asientan. Asimismo, procederá a verificar en una primera inspección su estado fitosanitario y de seguridad para así valorar su vulnerabilidad frente a agresiones o cambios del medio. Por último, realizará una valoración sobre medios y recursos necesarios para elaborar un plan individual de gestión para cada ejemplar catalogado y protegido, independientemente de su titularidad. “Es decir, no sólo se nutrirá del arbolado que es competencia municipal”, ha apostillado el delegado.

Localización, código de identificación; coordenadas (UTM/geográficas); propiedad o titularidad; especie; familia; perímetro de tronco; altura total;  altura del estípite en el caso de palmeras; diámetro de copa; edad estimada; número de brazos (cuando se trata de una palmera con varios brazos); texto explicativo de su singularidad; referencias documentales y datos sobre su ubicación, historia, curiosidades; estado y medidas de gestión y mantenimiento que se desarrollarán en su Plan de Gestión Específico; valoración de los posibles conflictos entre el ejemplar y el entorno arquitectónico, de servicios urbanos, tráfico y actividades, tanto en la estructura aérea como radicular; valoración patrimonial; cálculo de beneficios ecosistémicos del ejemplar analizado, y características del conjunto que deben obligatoriamente mantenerse en el caso de la arboleda. Son algunos de los contenidos de la prolija ficha técnica que acompañará a cada ejemplar, según recogen los pliegos del contrato licitado.