La pandemia ha modificado los hábitos de los ciudadanos incorporando el uso diario de mascarillas y guantes usados como medidas de prevención ante la Covid-19. Sin embargo, si no se desechan correctamente, se suma como problema añadido a los ya habituales en el funcionamiento de las redes de saneamiento que gestiona Emasesa.

A la ya habitual campaña #ToallitasAlCubo, este año Emasesa activa la campaña #MascarillasAlCubo para concienciar a la ciudadanía de la necesidad de darles a las mascarillas un final adecuado al dejarlas de utilizar, ya que ni mascarillas ni guantes pueden ser arrojadas al inodoro. En Sevilla se recogen más de 30.000 kilos de toallitas húmedas al mes, por lo que no se puede permitir sumar más residuos sólidos no biodegradables a la red de Emasesa, generando graves problemas medioambientales.

Esta campaña coincidirá con las acciones preventivas en la red de saneamiento que la empresa pública del agua pone en marcha cada año a finales del mes de agosto en la red de saneamiento, con el objetivo de garantizar el perfecto funcionamiento de la trama urbana y de las poblaciones que gestiona, ante las primeras lluvias de temporada.

Estas acciones se inician de manera especial con la limpieza de imbornales en colegios y sus accesos, comprobándose el funcionamiento de ellos y detectando posibles averías sufridas durante el tiempo seco. Posteriormente, en los inicios del mes de septiembre, se procede con la limpieza de rejillas y canales de pasos inferiores, retirando la suciedad y basura que pueda obstaculizar la entrada de agua a los bombeos para su evacuación.

Estas acciones se llevan a cabo durante todo el año, como programa rutinario para el mantenimiento de redes y elementos  independientemente de la época del año. Si bien existen fechas relevantes de actuaciones puntuales como las referidas además de las específicas de Semana Santa, Feria de Abril y Navidad. Emasesa gestiona una trama de redes de alcantarillado de Sevilla y las poblaciones del Área Metropolitana con más de 1.500 kilómetros de redes de diferente sección y con más de 143.000 imbornales que recogen las aguas de lluvia.

Desde hace muchos años, parte esencial de la misión de Emasesa es garantizar el ciclo integral del agua de una forma eficiente e innovadora, desde estrategias de desarrollo sostenible, hacia el objetivo transversal que demandan sus usuarios: el equilibrio y cuidado del medio ambiente. Esto se traduce en su política sistemática de la mejora continua de infraestructuras para reducir las pérdidas en la red, circunstancia que permiten mitigar y adaptarse al cambio climático, además de  garantizar el derecho humano al agua.

Esta preocupación frente al cambio climático ha activado en Emasesa una estrategia de #50medidas para contribuir a mitigar los efectos del calentamiento global, inspirando un documento donde se recogen 50 medidas que nacen con la vocación de ofrecer un suministro de agua de calidad a una sociedad, que ha ido cambiando con el paso de los años, preocupada por el futuro, concienciada con la sostenibilidad y que demanda que los servicios públicos estén en sintonía con esas nuevas circunstancias. Con ello, Emasesa da un paso al frente; ya no sólo es una empresa que proporciona una de las aguas de mejor calidad de España, sino que se convierte en uno de los actores más activos en la lucha contra la emergencia climática en nuestro entorno más cercano.

¿Qué no podemos olvidar?

  • Toallitas, mascarillas y guantes: ¡al cubo de la basura!
  • Compresas, pañales, tampones y preservativos. Arrojar este tipo de elementos por el inodoro es el camino más corto para padecer un atasco en el hogar. Utiliza la papelera.
  • Bastoncillos. Son muy dañinos, debido a que se enredan fácilmente con otros residuos formando acumulaciones que generan atascos. Tíralos a la papelera
  • Medicamentos. Todas las farmacias disponen de contenedores especialmente pensados para eliminar medicamentos caducados. Arrojados a la red resultan muy perjudiciales por su gran carga química y su dificultad de depuración.
  • Aceites usados y grasas. El aceite resulta altamente contaminante, y su depuración es muy costosa. Se recomienda almacenar el aceite usado en recipientes y después depositarlos en los puntos limpios.
  • Restos de comidas. Antes de introducir los platos en el fregadero, se recomienda limpiar los restos de comidas, evitando su vertido por el fregadero.