Miles de personas han recorrido las principales arterias de la capital hispalense para mostrar su indignación por el sistema político, económico y social.
Como un ejemplo de protesta pacífica. Así han calificado los miembros del movimiento 15-M la jornada de manifestaciones vivida en todo el mundo este 12 de mayo, como conmemoración del nacimiento del fenómeno hace ya un año. Miles de sevillanos han participado en la marcha que salía pasadas las 19:30 horas de la Plaza de España bajo un sol de justicia y con un lema inicial “Retoma la plaza. Rescate ciudadano global”.
Abuelos, padres, niños, profesores o estudiantes han desafiado las altas temperaturas para “luchar por nuestros derechos”, señalaban. Los manifestantes han cantado eslóganes y lemas en contra de las últimas medidas del gobierno, los dos partidos mayoritarios y el sistema financiero. Especialmente duras han sido las alusiones a políticos y banqueros que han merecido los peores calificativos.
Efectivos de la Policía Nacional y organizadores han coincidido en destacar la falta de incidentes en una marcha que ha congregado a unas 2.000 personas según datos oficiales, una cifra que se eleva hasta las 10.000 según estimaciones de la organización. Guerra de cifras aparte, la tónica dominante ha sido la convivencia pacífica de personas de diferentes generaciones que han saltado a la calle, entre ellas, el actor Willy Toledo; el parlamentario de IU, José Manuel Sánchez Gordillo y el portavoz del SAT, Diego Cañamero, quienes no quisieron perderse la manifestación.
La marcha también ha hecho guiños a los principios del movimiento. Se han escuchado cánticos como “Lo llaman democracia y no lo es” o “No nos representan”, muy coreados en los inicios del 15-M el pasado año. Sin embargo, las últimas medidas del gobierno de Mariano Rajoy han cobrado gran parte del protagonismo. Los recortes en Educación y Sanidad, así como las medidas de rescate a bancos y entidades financieras han sido el foco de las críticas de los manifestantes. “Esta crisis no la pagamos”, era uno de los eslóganes más escuchados durante la marcha.
Sobre las 21:30 horas, la manifestación tornaba a su fin en las setas de la Encarnación, donde la periodista Rocío Muñoz leyó un emotivo manifiesto final que apelaba a la “unidad y la lucha contra los abusos de gobiernos, políticos y banqueros” y a “seguir defendiendo derechos fundamentales”. Una vez allí, fuentes de la comisión organizadora de los actos del 12 M, afirmaron que no llevarían a cabo ninguna acampada pero sí manifestaron la intención particular de decenas de personas de seguir reunidos en la Encarnación durante toda la noche hasta el comienzo de los actos que tendrán lugar mañana a las 12:00 horas. Desde la organización de la marcha confían en que se pueda lograr una convivencia pacífica a lo largo de la noche con los agentes de la Policía Nacional desplegados por la zona.