La Guardia Civil ha investigado en Sevilla a cuatro personas, de entre 26 y 45 años, por hurtar recetas de dos centros sanitarios y falsificarlas para obtener un fármaco con clorazepán, utilizado para elaborar la droga alucinógena “karbuki”. Se les imputa los supuestos delitos de falsificación de documento público, hurto y contra la salud pública.

La investigación se inició tras recibir el aviso del titular de una farmacia de la localidad de Fuentes de Andalucía de que un hombre intentaba canjear una receta de un medicamento, cuyo principio activo era clorazepán, algo que dio razones suficientes para sospechar que se tratase de una falsificación. Este tipo de medicamentos solo deben ser utilizados bajo prescripción  y supervisión médica pero la Guardia Civil, sabía que eran utilizados para elaborar una droga conocida como “karkubi”.

Cuando los agentes llegaron, el sospechoso había huido, quedándose el farmacéutico con la receta donde aparecían nombre, apellidos y DNI del supuesto paciente. Ante esta situación, los agentes se entrevistaron con los titulares de otras farmacias de la localidad y averiguaron que la misma persona había logrado canjear la receta por el medicamento y que estos farmacéuticos poseían las recetas presuntamente falsificadas, en las cuales constaba como paciente la misma persona que en la primera receta localizada.

En el transcurso de la investigación, otro farmacéutico informó de que otra persona había intentado canjear recetas para obtener el mismo medicamento y que iba acompañado por otros dos hombres. La rápida reacción permitió localizarlos en una cafetería e identificarlos, localizando igualmente el vehículo en el que se desplazaban y en el que se halló un talonario entero de recetas. En todas ellas se encontraba prescrito el mismo fármaco (con clorazepán como principio activo) y a la misma persona. Las recetas estaban firmadas y selladas con sellos de médicos (nombre, apellidos y números de colegiado).

La Guardia Civil comprobó que todos los identificados tenían antecedentes por delitos contra el patrimonio y tráfico de drogas. En base a ello, los agentes incautaron el referido talonario de recetas. Se comprobó también que el nombre y DNI que aparecían en la primera receta eran los mismos, aunque el sello y los datos eran de otro médico. 

Posteriormente, la Guardia Civil contactó con el facultativo que aparece en el talonario, y de la información obtenida se desprendió que se trataba de una falsificación, motivo por el que dicho facultativo presentó denuncia. Asimismo, agentes de San Juan de Aznalfarache instruyeron diligencias por idénticos motivos, siendo el perjudicado el doctor que aparecía en la primera receta.

Por todo ello, se ha solicitado al Servicio Andaluz de Salud información y se ha averiguado que uno de los investigados canjeó durante el 2019 un total de 631 recetas del mismo fármaco y otro de ellos, un total de 43 recetas también del mismo, más las que fueron incautadas. Las recetas habrían sido sustraídas en un centro de salud y en un hospital de la provincia de Sevilla.