Desde el principio de la epidemia, en el Hospital Universitario Virgen Macarena se instauró un equipo asistencial de carácter multidisciplinar para atender a los pacientes con COVID-19. Un equipo coordinado desde el Servicio de Enfermedades Infecciosas que dirige el especialista Jesús Rodríguez Baño, integrado además por los Servicios de Medicina Interna, y Neumología, en colaboración continua y directa con los Servicios de Urgencias y de Cuidados Intensivos. Una atención especializada a estos pacientes, con la participación absolutamente fundamental de enfermería y del resto de profesionales.

Recientemente, se han ido incorporando al grupo de trabajo profesionales de otros servicios como Oncología, Anestesia y Reanimación, Endocrinología, Aparato Digestivo, y Alergología. El equipo COVID-19 analiza la situación de todos los pacientes dos veces al día, actualizando protocolos clínicos y examinando los resultados, en contacto directo con los equipos profesionales de otros centros hospitalarios nacionales e internacionales.

El equipo del Hospital Virgen Macarena cuenta además con el soporte continuo de los Servicios de Microbiología, Medicina Preventiva, Radiodiagnóstico, Análisis Clínicos y el resto de servicios del centro hospitalario. Asimismo, el grupo de gestión de COVID-19 del Hospital, se reúne también a diario, acordando las medidas generales de actuación con la dirección del centro. Gracias a esta integración global de actividades, el Hospital Virgen Macarena ha podido mantener hasta la actualidad, una sistemática de trabajo ordenada y protocolizada, explica el jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas, Rodríguez  Baño.

Por otro lado y de forma reciente, se ha puesto en marcha en el centro hospitalario, la Unidad de Monitorización COVID-19 para controlar a pacientes inestables, donde se facilita la atención monitorizada de los enfermos que no requieren ingreso en la UCI pero sí requieren un nivel de asistencia superior al que pueda precisar en una planta de hospitalización convencional.

En el ámbito de la investigación, el hospital sevillano participa ya en el estudio promovido por la Organización Mundial de la Salud, denominado EPICOS (Ensayo Clínico para la Prevención de la Infección por Coronavirus en Sanitarios), donde  participarán unos 4.000 profesionales de 62 hospitales de 13 comunidades autónomas, entre ellos seis andaluces, como es el caso del Hospital Virgen Macarena. En esta línea investigadora se iniciarán en breve otros tres ensayos clínicos, y varios estudios observacionales que pretenden ofrecer a sus pacientes los avances en el tratamiento y mejorar los resultados, así como la protección a los profesionales sanitarios.

Para Jesús Rodríguez Baño, aunque el ritmo de trabajo y la dureza de la enfermedad puede causar un desgaste importante en el ánimo de los profesionales, la entrega y el compromiso de todos ellos es admirable. Rodríguez Baño se siente orgulloso al explicar, entre todos, hemos conseguido un ambiente de trabajo y compañerismo magnífico, que de alguna forma ayuda a soslayar todas las dificultades. Los profesionales son conscientes de que su excelente trabajo en equipo, en el que todos aprendemos de todos, salva vidas y, cuando no puede hacerlo, acompaña de la forma más humana posible, esa es la mayor satisfacción posible para un sanitario.