Investigación de la Guardia Civil / GC

La Guardia Civil ha concluido finalmente la investigación de la listerioris, con seis detenidos y dos investigados. Magrudis conocía el primer positivo en listeria desde finales de 2018, pero no se comunicó a las autoridades.

La Guardia Civil ha concluido la investigación abierta tras los casos de listeriosis con un total de ocho personas investigadas. De estos ocho investigados, seis de ellos han sido detenidos. Dos de los detenidos se encuentran en prisión provisional sin fianza.

La investigación del Seprona de la Guardia Civil, en coordinación con Eeuropol, ha determinado que los responsables de las empresas implicadas conocían la presencia de la listeria en sus productos desde finales del año pasado.

Los investigadores mantienen que al menos tres de los investigados sabían que un lote etiquetado con fecha de 20 de diciembre de 2018 había dado positivo en listeria. Los responsables de la empresa no informaron a las autoridades competentes de este resultado. Tampoco ha quedado acreditada la retirada de estos productos afectados, ni su destrucción. Este primer lote sería la causa de varios episodios de intoxicación en la provincia de Huelva.

La información recabada en los registros -de las empresas familiares y de los domicilios- confirmó esta hipótesis y amplió la investigación con la aparición de nuevos indicios.  El número de investigados aumentó entonces a ocho.

Hay intervenidas un total de 17 toneladas de productos que están siendo incinerados en una cementera de Jerez de la Frontera (Cádiz).

Operación Monocy

Del análisis inicial de la alerta sanitaria, se comprobó que el primer brote de intoxicación se produjo el 5 de agosto de este año en la provincia de Sevilla, aunque los primeros positivos de listeria no se detectaron hasta el 20 de agosto.

Iniciada la investigación, guardias civiles del Seprona analizan aspectos como  la trazabilidad, elaboración, lote, registro sanitario o fecha de caducidad, y observan que la alerta sanitaria corresponde con los productos cárnicos de la empresa investigada. Los responsables de esta empresa ocultaron que elaboraban y envasaban productos de marca blanca para otra empresa, que ésta última comercializaba como propios.

Uno de los aspectos fundamentales de la investigación ha sido el estudio realizado por personal técnico del Centro Nacional de Microbiología del Instituto Carlos III de Majadahonda (Madrid), sobre la cepa generadora del brote.  Este informe vincula la cepa encontrada en las instalaciones investigadas con los productos elaborados y las 193 personas intoxicadas.

En este contexto, la Jefatura del Seprona, participa como punto de contacto nacional dentro de la Red Europea de Fraude Alimentario, gestionada a nivel nacional por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

Ámbito internacional

Aunque la actividad de las empresas investigadas se centraba en España, cuatro miembros de una familia alemana resultaron intoxicados, al igual que un ciudadano de nacionalidad inglesa que se encontraba en Francia. Al existir estas conexiones internacionales, la Guardia Civil ha contado con la colaboración de Europol en los registros domiciliarios, así como en el análisis de las comunicaciones.