El juez instructor del caso Marta del Castillo, Francisco de Asís Molina, escuchó ayer el testimonio de cuatro jóvenes que aseguraron ver a su amigo Samuel, imputado por la desaparición y muerte de la joven sevillana, en el barrio de Montequinto, en Dos Hermanas. La versión de los testigos confirmaría la última versión de Samuel Benítez, en la que mantuvo que no participó en los hechos.

Sevilla Actualidad. Los cuatro testigos de la defensa de Samuel confirman su última coartada. Citados a declarar en el día de ayer ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla, todos –tres de ellos eran menores de edad- confirmaron haber visto a Samuel Benítez en la barriada de Montequinto en la tarde-noche del 24 de enero, el día en que desapareció Marta del Castillo.

Según fuentes del caso, dos de estos testigos vieron al segundo imputado en el caso por la tarde en Montequinto, mientras que los otros dos precisaron que lo vieron en el mismo lugar entre la 1:00 y las 2:15 horas de la madrugada del 24 al 25 de enero.

De esta manera, los testigos propuestos por el abogado defensor de Samuel, Manuel Caballero, corroboraron ante Francisco de Asís Molina la última versión ofrecida por el imputado acerca de que el día de los hechos.

Cabe recordarse que la novia y dos amigas de Samuel ya aseguraron ante el juez instructor que el joven estuvo acompañado en la barriada de Montequinto, en el municipio de Dos Hermanas, durante todo el día en el que supuestamente se produjo el crimen de la menor.

La coartada

La novia de Samuel Benítez afirmó que estuvo casi toda la tarde del 24 de enero con el imputado, excepto en el tramo de una hora y media en la que ésta fue a arreglarse a su vivienda. En ese lapso de tiempo, el joven estuvo acompañado por otros amigos, según el relato de las otras dos testigos que acudieron entonces al Juzgado.

Esta testigo, que confirmó la coartada de su novio al asegurar que estuvo con él en una hamburguesería hasta las 22:00 horas aproximadamente, estuvo en su domicilio hasta las 23:30 horas, cuando, según su relato, volvió a reunirse con Samuel en el mismo barrio.

Según la versión de la pareja del imputado, su novio recibió una llamada del entorno de Marta alrededor de las 23:45 horas de la noche de su desaparición, en la que se le solicitaba el teléfono de Miguel Carcaño para contactar con él y cuestionarle por el paradero de la menor.

A partir de ahí, la novia del joven supuestamente acompañó a éste a una parada de autobús de Montequinto, en el trayecto hacia la cual se encontraron con varios amigos, con quienes departieron sobre un tiempo indeterminado. La novia del joven llegó con Samuel a la citada parada de autobús tras despedir a estos amigos y estuvo un rato más con él hasta que éste cogió un autobús que lo llevó a la capital hispalense, si bien la hora concreta en la que toma el transporte público no ha quedado aclarada del todo.

Cambios en los testimonios. Con estas testificales, el instructor del caso intentará aclarar cuáles fueron realmente los pasos que dio el imputado el 24 de enero, pues el sospechoso reconoció tras su arresto que prestó ayuda a Miguel Carcaño para deshacerse del cuerpo de la menor, si bien, posteriormente, se desdijo ante el juez y negó que tuviera conocimiento de los hechos por los que fue enviado a prisión.

En un primer momento, Miguel aseguró que su amigo Samuel le había ayudado a tirar el cadáver de Marta al río Guadalquivir, aunque el 17 de marzo los dos cambios de testimonio del principal imputado dieron un giro importante al caso. Ese día, el implicado cambió por completo la versión mantenida hasta la fecha y apuntó que fue el menor conocido como ‘El Cuco’ quien acabó con la vida de la joven estrangulándola.

En esta versión, Miguel otorgó a Samuel la figura de cooperador a la hora de deshacerse del cuerpo, que, según manifestó, no tiraron al río sino a un contenedor cercano a su vivienda de León XIII.

El martes declaran el padre y el tío de la menor. Mientras tanto, continúan las declaraciones ante el juez. El próximo martes prestarán declaración el padre de Marta, Antonio del Castillo, y el tío, Javier Casanueva, con el objetivo de que confirmen las declaraciones ya prestadas sobre el proceso de búsqueda de la joven.

Hasta este momento, el padre de Marta había comparecido una única vez ante el juez Francisco de Asís Molina para ratificar su denuncia por la desaparición de su hija, mientras que el tío no había acudido nunca a los juzgados.

El mismo martes, el juez de Instrucción número 4 escuchará el testimonio de varios amigos de la joven que participaron en las tareas de búsqueda la noche de la desaparición de la joven, asesinada posteriormente en una vivienda del número 78 de la calle León XIII.