La Fiscalía del Tribunal Supremo ha recurrido en casación la sentencia dictada contra La Manada por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, al entender que los cinco integrantes deberían ser condenados a dieciocho años de cárcel por delitos de agresión sexual y no a diez por abuso sexual con prevalimiento.
Al entender que los hechos descritos no corresponden con lo determinado por la Audiencia de Navarra y el Tribunal Superior de Justicia, la Fiscalía pide ocho años más de cárcel por un delito que viene derivado de una «intimidación grave», la que permitió llevar acabo los actos sexuales descritos.
En total, la solicitud completa es de dieciocho años de prisión, así como 10 años de libertad vigilada e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena y prohibición de acercamiento a la víctima durante veinte años. Además, solicita dos años más para uno de los acusados, Antonio Manuel Guerrero Escudero, por el robo con intimidación del móvil de la víctima.
El detonante del recurso, está en la tipificación que el Código Penal hace de los delitos de abuso y agresión sexual. La Fiscalía difiere y pide al Supremo que lo rectifique, al creer que los hechos que se dan por probados constituyen «sin género de dudas una actitud intimidatoria por parte de los cinco acusados que fue la que les permitió consumar sobre la víctima los actos sexuales descritos».