El 22% de los bares y cafeterías de la capital hispalense cuentan con un escalón alto sin rampa que impide el acceso de las personas con movilidad reducida. El 20% no poseen barra abatible y el 21% carece de espacio suficiente que permita la maniobrar con la silla. También el 22% de los citados locales no poseen un cartel a la entrada indicando si en el interior establecimiento se permite o prohíbe fumar.

 
Sevilla Actualidad. Tras realizar una encuesta sobre 94 bares y cafeterías sevillanas, la Asociación de Consumidores en Acción de Sevilla-FACUA ha obtenido como resultado que en uno de cada cinco de estos establecimientos se hayan instaladas barreras de acceso para discapacitados. Los usuarios con movilidad reducida no pueden acceder al 22% de los bares y cafeterías, ya que cuentan con un escalón alto sin rampa.

FACUA ha denunciado a decenas de establecimientos en los pasados meses por diversas irregularidades. Es por ello que la Asociación ha solicitado a la Delegación de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Sevilla que eleve las inspecciones sobre el sector y aplique sanciones que intenten reducir los citados incumplimientos de la normativa.

Según FACUA, la cuantía de las multas que impone el Consistorio es “ridícula” lo que lleva a los responsables de las infracciones a “saltarse” la obligación de establecer barreras que faciliten el acceso a los discapacitados.

La Asociación también ha denunciado que ni Ayuntamiento ni Delegación Provincial de la Consejería de Salud han realizado inspecciones para evaluar el cumplimiento de la Ley del tabaco.

Asimismo, FACUA también ha comprobado si los citados establecimientos gozaban de aseos adaptados para minusválidos. De este modo, la asociación ha comprobado que un aseo refleja en la puerta de entrada que es accesible para personas con movilidad reducida, pero al entrar el servicio no cuenta con los requisitos necesarios. Se produce también en el sentido contrario, que son aseos habilitados total o parcialmente y no se indica en la puerta.

Concretamente, el 20% de los váteres de los aseos no disponen de barra abatible que permitan facilitar acceder a un usuario en silla de ruedas. El 21% de los servicios carece el espacio suficiente para maniobrar con la silla, distancia que se encuentra en 1,5 metros.

Lista de precios. El 50,7% de los bares y cafeterías sevillanas carecen de ellas en la entrada del establecimiento, aunque en Andalucía tan sólo es obligatorio en el interior del establecimiento, salvo que se trate de un restaurante o cafetería con categoría catalogada de primera. Sin embargo, el 13% de los locales tampoco cuentan con listas de precios visibles para los usuarios en el interior.

En el 41,2% de las cartas revisadas se indican los precios de las comidas, pero olvidan una parte de las bebidas. Asimismo, un 6% exponen que los precios que se muestran no incluyen el IVA, algo que supone una práctica ilegal.

Hoja de reclamaciones. Por su parte, uno de cada cuatro establecimientos (25,5%) no expone en un lugar fácilmente visible un cartel que informe a los consumidores de que el establecimiento posee hojas de reclamaciones a su disposición.

Ley del tabaco. Alrededor del 22% de los establecimientos que poseen menos de 100 metros cuadrados incumple la Ley del tabaco al no exhibir un cartel a la entrada indicando si en el establecimiento se permite o prohíbe fumar en su interior. El 6% muestra el cartel indicando que está prohibido fumar, permitiéndose en casi un 94%, bien porque lo indican con un cartel (71,6%) o ante la ausencia del mismo (22,2%).

En lo que se refiere al estado de limpieza de los establecimientos, el 35% de los encuestados califican como aceptable la higiene de los locales, el 1,1% piensan que es baja y el 63,8% creen que es alta o muy alta.

En el concreto caso de los aseos, el grado de limpieza es aceptable en un 42,6%, baja en un 4,3% y alta o muy alta en el 53,2%. Sin embargo, más del 17% de los servicios carecen de papel higiénico, alrededor del 14% de jabón y más del 25% no cuenta con tapa en el váter. Además, el 6,6% de los aseos se utiliza a la misma vez para almacenar mercancías.