Viviendas de Sevilla / Luis Serrano

El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) bajará un 5 % en la ciudad de Sevilla el próximo 2019. Las Ordenanzas Fiscales aprobadas este jueves 27 de diciembre por el pleno del Ayuntamiento incluirán  una bonificación del 95 % de este impuesto para las viviendas que se pongan a disposición de Emvisesa para que sean alquiladas con fines sociales. PP y Cs apoyaron al gobierno socialista para la aprobación de estas ordenanzas fiscales mientras que IU y Participa votaron en contra de la mayoría de medidas fiscales.

La rebaja del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) para las familias sevillanas, las bonificaciones en el alquiler de las viviendas vacías a Emvisesa con la finalidad principal de incrementar el parque público con fines sociales y una congelación del resto de precios y tasas conforman las líneas directrices de las Ordenanzas Fiscales de 2019. Estas se desglosan en los siguientes 10 apartados que combinan objetivos familiares –tras reducirse la presión fiscal sobre los hogares– con un nuevo impulso a la actividad empresarial y al mercado de trabajo, puesto que las empresas sevillanas reducirán gastos.

  • Descenso del 5% en el IBI, lo que supone una reducción acumulada durante el actual mandato del 8%. La rebaja supone que una familia con una vivienda con un valor catastral de 50.000 euros pasará de pagar 403 euros de IBI al año en 2015 a una cuota de 371,69 euros al cierre de 2019.
  • Reducción del tipo diferenciado que se aplica principalmente a las grandes empresas con valores catastrales altos: 1% de disminución, siguiendo el criterios de progresividad fiscal.
  • Reducción del ICIO (Impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras) al 3,25%, lo que supone que en el conjunto de este mandato se habrá conseguido una reducción del 16% en este impuesto que ha coincidido con el incremento de la actividad económica.
  • Bonificación en el IBI del 95% para los titulares de viviendas vacías que las pongan a disposición de Emvisesa para que sean alquiladas con fines sociales.
  • Supresión de la tasa por la tramitación de convenios urbanísticos a instancia de parte.
  • Incremento de la bonificación por domiciliación al 5% para quienes realicen la tramitación desde el 1 de enero de 2019.
  • Extensión de todas las bonificaciones existentes en las Ordenanzas a familias numerosas para las familias monoparentales.
  • Reducciones en las tasas por documentos, del cementerio y tasa de recogida de basura para personas en situación de exclusión social, con informes previos por parte de los Servicios Sociales.
  • La utilización privativa o el aprovechamiento especial del dominio público con elementos publicitarios y/o la instalación de publicidad con frente directo a la vía pública o en línea de fachada tendrá un recargo del 100% en la tarifa a aplicar en el caso de tratarse de una publicidad referida a casas de apuestas.
  • Congelación con carácter general de las tasas, los precios públicos y los impuestos municipales, sin aplicar siquiera la actualización del IPC ni en Tussam, ni en Emasesa ni en ningún otro servicio público que dependa del Ayuntamiento de Sevilla.

En su intervención ante el Pleno del jueves 27 de diciembre el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha agradecido el apoyo de los grupos a unas ordenanzas que, ha insistido, rebajan la presión fiscal a familias y empresas. “Vamos a terminar el actual mandato con la menor presión fiscal que este Ayuntamiento ha tenido en años y, asimismo, perfectamente homologable a la presión fiscal más baja entre los ayuntamientos de España y adecuada a nuestra ciudad al tiempo que ha mejorado la recaudación de nuestros ingresos para dar respuesta a los servicios públicos”, ha añadido.

Las Ordenanzas Fiscales son la base de las líneas generales de los ingresos del Presupuesto municipal para 2019. Por ello, el regidor ha reiterado a los grupos políticos la petición de que “apoyen o se abstengan” en el proyecto de Presupuestos del gobierno para 2019, “en interés general de la ciudad y que sirva tanto para el actual gobierno como, sobre todo, para aquel que decidan los ciudadanos y las ciudadanas (en las elecciones municipales del próximo año)” y que marcará, además, el techo de gasto para el de 2020, según ha concluido Espadas.