Tabaco picado ilegal (imagen de archivo) / SA

La Guardia Civil y la Agencia Tributaria, en el marco de una operación conjunta, han desmantelado una red internacional dedicada al contrabando de tabaco en España, de forma que en esta operación han sido detenidas diez personas y se han aprehendido cerca de veinte toneladas de picadura de tabaco en varias naves situadas en las provincias de Sevilla, Córdoba y Málaga.

La operación se ha iniciado cuando, gracias a la estrecha colaboración con las autoridades aduaneras de Francia, se ha obtenido información acerca de la adquisición de importantes partidas de labores de tabaco no apta para consumo humano, que eran efectuadas por una empresa radicada en Córdoba y que iban a ser supuestamente destinadas a su utilización como abono en actividades agrícolas.

Ante las sospechas de que se desviara al consumo humano, se comenzó en el pasado mes de mayo una investigación para determinar estos extremos, corroborándose gracias a la misma cómo, a través de diversas empresas de transporte, los máximos responsables de esta organización, tras adquirir y recibir las partidas de tabaco, rápidamente la retiraban del circuito comercial y la distribuían por Andalucía y Extremadura a otros clientes finales para su destino a consumo.

Fruto de esta investigación, en una primera fase llevada a cabo en el mes de junio en las provincias de Córdoba y Sevilla, se efectuó la detención de ocho personas por delitos de contrabando de labores de tabaco, contra la salud pública y contra la Hacienda Pública, así como la incautación de 10 toneladas de picadura de tabaco.

Posteriormente, en una segunda fase a comienzos del mes de agosto, se logró incautar 10 toneladas más de picadura de tabaco, en una nave de Mollina (Málaga), deteniendo a otras dos personas más e interviniendo dos vehículos y un camión donde transportaban las labores de tabaco incautadas.

Gracias a esta operación, llevada a cabo por el  EDOA de la Comandancia de la Guardia Civil  de Sevilla y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, se ha podido retirar del consumo una importante cantidad de tabaco picado ilegal, y carente de control por las autoridades sanitarias, equivalente a dos millones de cajetillas.

La investigación continúa abierta y no se descarta la posibilidad de practicar nuevas detenciones.