Los profesionales de la Unidad de Neonatología ultiman ya el proceso para enviar leche materna donada a bebés nacidos en la provincia de Huelva.

Más de 400 familias se han beneficiado ya de la consulta de lactancia materna en situaciones difíciles de la Unidad de Neonatología del Hospital Universitario Virgen del Rocío. La dificultad de agarre al pecho, el frenillo sublingual o la poca producción de leche son las demandas y dudas más frecuentes que se encuentra el personal que la atiende, en la segunda planta del Hospital de La Mujer.

Esta es una de las actividades de promoción de la leche materna que estos profesionales realizan y están promoviendo especialmente durante de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra hasta el próximo 7 de agosto con el lema ‘Lactancia materna: fundamento de la vida’, en la que participan cada año la Alianza Mundial pro Lactancia Materna (WABA) junto a la OMS y UNICEF.

Así, y durante todo el año, la Unidad de Neonatología trabaja apoyando a las parejas que deciden amamantar a sus hijos hospitalizados y, para ello, además de la consulta de lactancia materna en situaciones difíciles, ofrecen ayuda y acompañamiento para el establecimiento de la leche materna en los neonatos más frágiles, y atienden el banco de leche humana donada.

De hecho, están ultimando el proceso para empezar a enviar leche humana donada a los hospitales onubenses. En concreto, han completado la formación del personal de Huelva, que ha rotado por el Hospital Virgen del Rocío, y ya se han validado los circuitos de seguridad del banco, incluido el transporte.

Hasta la fecha, un total de 471 bebés nacidos en alguno de los hospitales de Sevilla (Virgen del Rocío, Valme o Macarena) han recibido leche materna procedente del Banco de Donación del Hospital Universitario Virgen del Rocío. Los grandes prematuros, los bebés que nacen por debajo de la 32 semana de gestación o que pesan menos de 1.500 gramos son los grandes beneficiarios de este alimento. Otro grupo de pacientes que se beneficia especialmente de la leche donada son los recién nacidos que han precisado cirugía abdominal así como los pacientes con cardiopatías congénitas graves, en el periodo más crítico de su evolución.

Los profesionales consideran que la leche materna de su propia madre es el mejor ‘alimento’ y el mejor ‘fármaco’ que pueden tomar estos pequeños para su recuperación, siendo la leche donada la segunda mejor elección. En ocasiones, hay madres que no pueden amamantar a sus hijos o no pueden extraerse suficiente leche materna, y otras con una secreción láctea superior a las necesidades de su bebé. Así, durante los 18 meses de funcionamiento del Banco se han entrevistado a más de 250 mujeres con deseos de donar. Gracias a ellas, se ha podido procesar y pasteurizar unos 1.400 litros de leche, de los que se han beneficiado receptores de los tres hospitales de la capital sevillana.

Toda mujer con buen estado de salud que esté amantando a su hijo y pueda generar más leche de la que demanda su hijo podrá ser, en principio, donante de leche. Para ello, han de contactar con el Banco de Donación para ser entrevistadas, con una encuesta de salud y de hábitos saludables.

Posteriormente, se les realiza una serología para descartar riesgo de transmisión de infecciones, dado que a través de la leche humana se puede transmitir algunas infecciones, tóxicos o fármacos que pueden producir efectos adversos en el receptor. Toda esta labor de información, entrevista y seguimiento del proceso de la donación de leche materna se realiza en la consulta de lactancia materna en situaciones difíciles, coordinada por la neonatóloga Pepa Aguayo y la enfermera Elena Díaz.

Requisitos para ser donantes

En principio, podrán donar todas las mujeres sanas con un estilo de vida saludable, que tengan bien establecida la lactancia tras cubrir las necesidades de su propio hijo. Así, deben estar amamantando, extrayéndose leche para su hijo o tener leche correctamente congelada en domicilio por un periodo inferior a 15 días.

Se acepta como excepción la leche acumulada, siempre que haya sido correctamente conservada, en los casos de mujeres cuyo hijo ha fallecido. También la leche almacenada en la Unidad de Neonatología del Hospital Virgen del Rocío o de otros centros hospitalarios receptores de leche donada. En estas dos últimas circunstancias se aceptará calostro y leche intermedia, que no vaya a ser ya administrado al hijo/a.

El funcionamiento del Banco de Donación de Leche Materna es muy parecido al de un Banco de Sangre, dado que es un gesto altruista y voluntario. Para su puesta en marcha, los profesionales llevan desde junio preparando las instalaciones y trabajando en el procesamiento de todas las normas de calidad y seguridad, puesta a punto de la base de datos, los circuitos de la donación, prescripción. Igualmente importante ha sido la formación específica del personal que atiende a las mujeres que desean donar.

Para garantizar la seguridad de la leche donada, siempre se pasteuriza para que este procesamiento destruya los virus o bacterias que pudieran contener. En esta línea, el Banco se ha dotado de un sistema informático que registra la trazabilidad de los lotes de leche materna que se conservan.