Ganar hoy era necesario. Hacerlo en el Sánchez Pizjuán, donde tan desafortunados resultados se han obtenido esta temporada, era, además, imprescindible. Vuelven Kanouté y Luis Fa… y vuelve el Sevilla.
Sara Domínguez. Siguen apreciándose las carencias en el juego sevillista, pero contra el Tenerife se dio una imagen distinta. Este partido tiene que ser el punto de inflexión del Sevilla de Antonio Álvarez.
En la primera mitad, el juego por las bandas, con Capel y Adriano como exponentes máximos, desbordó al conjunto isleño. Hubo centros al área desde el minuto 1, fallados en varias ocasiones. Era sobre todo este juego desde las puntas el que imperaba, pero también se unían los quiebros de dos grandes delanteros que no estaban últimamente en su mejor momento, y que hoy han conectado como en los viejos tiempos: Luis Fabiano y Kanouté.
Fruto de esta conexión, nace el 1 a 0 en el minuto 21, cuando un recorte de Luis Fa termina en una pase al malí, que cuela el balón dentro de la portería de Aragoneses. El Tenerife estaba superado, aunque nunca lo dejó de intentar frente a la defensa sevillista, que estuvo ahí para impedir que esos intentos acabasen en el empate.
Luis Fabiano, en su renacer, también tenía que marcar, y lo hizo en el minuto 43. Fue a pase de Renato, con un espectacular control orientado del brasileño, que manda el balón cruzado a la portería rival. Al filo del descanso, este era el 2 a 0. Y así ambos equipos se iban al descanso.
Ya en la segunda parte, el partido fue más de lo mismo: el Tenerife intentándolo, el Sevilla impidiéndolo y ocasiones blanquirrojas que no acababan en grandes peligros. Cada vez menos, eso sí, medio por desgaste medio por relajación.
El tercero del Sevilla fue el más bonito del partido y no fue ni de Luis Fabiano ni de Negredo, que había salido sustituyendo a Kanouté. Fue, mira por donde, del canterano Jose Carlos, que consigue marcar un tanto perfecto por la escuadra de Aragoneses.
Resultado contundente el que cosecha el Sevilla que, por fin, se reencuentra con la victoria. Lo que queda esta jornada es esperar a que falle el Mallorca, y lo que queda esta temporada es no tener que esperar a que falle el Mallorca.